Toca disipar las dudas. Sí, es la segunda jornada. Sí, es la temporada más rara de la historia. También es correcto decir que la pretemporada sólo ha tenido tener un test clandestino. Pero la exigencia del Real Madrid hace que en el segundo partido de Liga de los blancos, el tercero para el Betis, su rival, toque demostrar que el campeón está preparado para defender su trono.
Después de empatar a cero ante la Real Sociedad en un partido en el que el Real Madrid fue de más a menos y demostró una falta de pegada conocida de la temporada pasada, ante el Betis tratará de dar un golpe encima de la mesa. Un duelo ante un conjunto que sólo sabe ganar hasta el momento y que ha adquirido una madurez defensiva que, acompañada de su calidad, le convierten en un rival tremendamente complejo ante el que los de Zidane tienen que demostrar cosas. El entrenador también.
El galo, que tomó decisiones cuestionables en San Sebastián, cuando apostó por dos canteranos que ni están en la convocatoria en esta ocasión dejando en el banquillo a dos futbolistas del primer equipo como Jovic y Borja Mayoral, cuando lo que necesitaban era un gol, tiene que dar con la tecla. Para ello, desde el club esperan que frente al Betis apueste por lo seguro, no haga cosas raras, como dejar a Casemiro en el banquillo, y, sobre todo, estén acertados de cara a gol.
Para este encuentro Zidane tampoco podrá contar con dos jugadores que tienen que ser importantes esta temporada como son Asensio y Hazard. Ambos están trabajando con el grupo, pero nadie va a tomar riesgos con ellos y tendrán que esperar al duelo ante el Valladolid, si todo va bien, para volver a vestiré de corto. Sí pueden ser de la partida hombres como Isco y Lucas, que no estuvieron ante la Real Sociedad.
La principal duda en el once de Zidane estará en la delantera. Benzema parece seguro, mientras que Zidane deberá decidir si apuesta por Vinicius y Rodrygo, titulares en el primer partido de la temporada, o da la oportunidad a jugadores como Jovic o Mayoral. En el medio, Casemiro parece que esta vez sí arrancará de inicio, al igual que Kroos. Por lo tanto, la duda es si repite con Modric y Odegaard, con uno de los dos o entran en escena otros jugadores como Isco o Valverde. Dependerá del dibujo. Atrás no se esperan cambios.
Un Betis lanzado
Por su parte, el Betis llega al partido con el ánimo reforzado tras haber sacado hasta el momento los seis puntos en juego gracias a sus victorias ante el Alavés (0-1) y el Valladolid (2-0) para ocupar el coliderato junto al Granada.
El conjunto verdiblanco, al contrario que su rival, tuvo un efecto contrario de aquella victoria antes del parón y no lo aprovechó como refuerzo, peleando por evitar el descenso casi hasta el final, lo que provocó la puesta en marcha de un nuevo proyecto, con Manuel Pellegrini al mando, pero con apenas retoques.
De momento, el chileno ha logrado una mejoría tanto defensiva como ofensiva, lo que le hace sacar mayor partido al talento de Fekir, Joaquín y Canales, aunque le sigue faltando algo de gol y podría apostar por Tony Sanabria en punta en lo que sería la única novedad respecto al once que ganó al Valladolid.