Karim Benzema se prepara a conciencia para los últimos partidos de la temporada. El delantero del Real Madrid es uno de los futbolistas más utilizados por Ancelotti y el más determinante de la plantilla. Cualquier problema puede condicionar el devenir del equipo en este tramo final, lo que hace que ni el jugador ni el cuerpo técnico arriesguen lo más mínimo. Con el fin de preservarle y que llegue al cien por cien a la eliminatoria ante el Manchester City, el jugador se ha ejercitado a un ritmo distinto al del resto de sus compañeros en la vuelta del equipo a los entrenamientos, en el interior de las instalaciones de Valdebebas, con el único objetivo de recuperar fuerzas, puesto que no presenta problema alguno.
Su ausencia se ha debido a que el cuerpo técnico ha querido asegurarse de que el futbolista está en perfectas condiciones y no sufre ningún riesgo de lesión. El conjunto madridista cuenta ya con suficientes bajas y muchas de ellas son duda de cara al primer duelo de las semifinales de la Champions, que se disputará e Mánchester. Alaba, Casemiro y Mendy son duda para el encuentro y lo que menos puede permitirse el equipo ante esta situación es la ausencia de su principal referencia ofensiva y su máximo goleador.
Benzema ha mostrado problemas en estos últimos meses de la temporada, perdiéndose tres partidos por lesión en febrero y el Clásico disputado en marzo, aunque ahora parece estar en perfecto estado. El madridista ha acusado la falta de rotación y el conjunto blanco lo ha pagado. De hecho, en los encuentros en los que no ha jugado, el equipo marcó sólo un gol, que le sirvió para ganar un partido, mientras que empató otro y perdió en otros dos, destacando la goleada del Barça en el Bernabéu.
La presencia del francés, por tanto, es capital para la eliminatoria ante el equipo de Guardiola. Si los blancos quieren tener cualquier tipo de opción de estar en París, necesitan a Benzema en un estado óptimo, lo que le ha llevado a tomarse un ligero descanso, asegurarse de que todo va bien, antes de volver a la dinámica con el resto de la plantilla.
Karimdependencia
El galo se ha consolidado en el papel de estrella del equipo, liderando además la carrera para el próximo Balón de Oro. Es la pieza fundamental en el Real Madrid, que depende de sus goles, pero sobre todo de su presencia sobre el césped. Este curso suma 39 goles en 40 partidos disputados, destacando por encima del resto sus actuaciones en Champions League, donde ha marcado 12 goles, siete de ellos en las eliminatorias ante el PSG y el Chelsea. Pero no es sólo lo que marca, si no las facilidades que da al resto del equipo en ataque lo eleva aún más la dependencia que sufren los blancos de él.
Los madridistas están a la espera de cantar el alirón. En Liga han conseguido establecer una distancia lo suficientemente amplia como para que el título no corra riesgo a falta de cinco jornadas para el final. Las miradas se centran en la Champions, donde sí que necesitarán del mejor Benzema para buscar eliminar a los citizens y tratar de lograr la decimocuarta Copa de Europa en la historia del club.