Marco Asensio apunta a ser esta temporada un importante recurso para Carlo Ancelotti. El balear se ha presentado en numerosas ocasiones como un jugador diferencial partiendo desde el banquillo, aunque casi siempre lo ha hecho como atacante, desde el extremo diestro o zurdo. Ahora, el italiano ha encontrado una nueva fórmula para acomodar en su equipo al futbolista. En el estreno liguero del Real Madrid, ante el Alavés, el técnico optó por darle entrada sustituyendo a Modric, utilizándole como volante.
Asensio siempre ha mostrado cualidades para poder jugar en varios puestos del ataque, pero no ha sido habitual verle en el centro del campo, sobre todo en las últimas temporadas. Zidane confiaba en él como atacante y así le utilizó durante su segunda etapa en el club, en las que no llegó a haber un tridente ofensivo fijo, dada la intermitencia de Hazard por las lesiones y la alternancia entre Vinicius, Rodrygo y el propio Marco.
Durante las últimas temporadas, el mallorquín ha partido siempre tanto desde el extremo zurdo como desde el diestro. Parecía claro que era la demarcación en la que mejor rendía en el conjunto madridista y también en la Selección. Con España, bajo el mando de los diversos seleccionadores –Lopetegui, Robert Moreno y Luis Enrique– se ha desenvuelto pegado a la banda, una posición en la que también se le ha visto recientemente en los Juegos Olímpicos, donde su presencia fue fundamental para la consecución de la medalla de plata de los de Luis de la Fuente.
Sin embargo, su polivalencia le permite además partir desde más atrás. Ante la imposibilidad de encontrarle un hueco en el ataque que frene las expectativas que hay puestas en jugadores como Rodrygo y Vinicius, Ancelotti le enseñó en el arranque de la nueva temporada una nueva posición por la que competir.
El jugador entró al terreno de juego con apenas tres minutos por disputarse, a falta del descuento. Lo hizo por Modric, en un puesto en el que en las últimas temporadas no se le ha visto. Sin embargo, se puede tomar como un aviso de los planes que tiene el entrenador madridista para Asensio, que puede ser su comodín este curso.
Gran competencia en todos los puestos
Este curso, Ancelotti parece tenerlo claro en el ataque. Al menos, en estos comienzos de temporada. El entrenador madridista apuesta por Bale y lo hace de inicio y, con Hazard en buenas condiciones, a Asensio se le cierran las puertas como titular en el ataque. El belga y el galés apuntan a ser los jugadores que partan de inicio en los compromisos importantes, a la espera de ver qué sucede con el futuro de Mbappé, como acompañantes de Benzema en el tridente ofensivo.
La competencia en el ataque no queda ahí. La presencia de futbolistas como Vinicius Junior y Rodrygo, en cuyas proyecciones hay muchas esperanzas depositadas en el club, provocan que Ancelotti tenga que inventarse una nueva demarcación para dar acomodo a Asensio. Los dos brasileños parecen los recursos a los que recurrirá el italiano en caso de no poder disponer de sus extremos titulares, por lo que se hace necesario que el balear tenga que demostrar su polivalencia para adaptarse a una tarea distinta a la que está acostumbrado y para la que tiene calidad más que de sobra.
Por lo visto en el primer encuentro, no sería una novedad verle en los próximos meses ocupar el puesto que ocupan Modric o Kroos, aunque también hay gran competencia para tener presencia en el centro del campo. Además de los dos indiscutibles, jugadores como Isco, Ceballos y Ödegaard –si finalmente se queda– son recursos con los que el italiano piensa contar este curso.