Donny Van de Beek está de oferta. El holandés era uno de los jugadores que el Real Madrid tenía apalabrado para este verano antes de que sucediera todo lo relacionado con el coronavirus –que no es poco–, pero ya lleva dos meses en cuarentena a consecuencia de ello. Los blancos tenían todo cerrado, un acuerdo a tres bandas con el mediocentro y el Ajax por 55 millones de euros. Según The Times, las pretensiones de los holandeses, ante la posibilidad de que Donny siga un año más, habrían bajado hasta los 40 millones de euros.
Los blancos pusieron en pausa la operación por diversos motivos, la situación económica generaliza, el frenazo del campeonato, Modric… Había mucho que pensar, que meditar, y el guion fijado desde la cúpula merengue era claro: nada de locuras en este atípico verano. Como era de esperar, el preacuerdo con Van de Beek no sería eterno y su agente avisaba: «Otros clubes ya están llamando a mi puerta».
El Manchester United es que más interés ha mostrado en el holandés tras el club blanco y son los que tienen más opciones de aprovechar esa gran rebaja en su tasación que ha sufrido Van de Beek. De 55 a 40 van 15 kilos que, dados los tiempos en corren, es un pellizco que cualquiera quiere aprovechar, más con un centrocampista de la proyección de Donny. Las dudas blancas para cerrar la operación, el fuerte interés de los ingleses y la rebaja producida podrían llevar a un giro repentino del camino a seguir por el tulipán.
De hecho, existe buena sintonía entre Ajax y United. Ed Woodward, director ejecutivo de los Red Devils, tiene buena relación con el director general de los ajacieden, Edwin Van der Sar, un mito en Old Trafford. La salida del jugador está prácticamente sentenciada este verano, aunque queda por determinar donde acabará finalmente tras esta importante rebaja en su traspaso, con el foco puesto ahora en la Premier League.
