El Real Madrid es equipo de Champions. Por segunda vez consecutiva las blancas estarán entre las mejores del continente, gracias a su victoria ante el Villarreal y, sobre todo, a la del Barça frente al Atlético. Había dudas acerca de cómo afrontarían las culés su partido ante las rojiblancas, puesto que el empate en ese partido daba la clasificación a las rojiblancas y dejaba fuera al Madrid, pero cumplieron, ganaron y dejaron la puerta abierta a las de Toril, que lo aprovecharon por medio de un gol de penalti de Asllani.
El conjunto blanco necesitaba la victoria en la última jornada de la Primera Iberdrola y que el Barcelona se impusiera al Atlético para acceder a la tercera y última plaza de acceso a la Champions League. Las madridistas han ido remontando posiciones en la segunda vuelta y podían culminarla certificando su clasificación de nuevo para la máxima competición.
Salía Toril con un once revolucionario y muy ofensivo, en lo que era una clara declaración de intenciones. Lo hacía con Misa en portería y una defensa de tres formada por Ivana, Peter –capitana en su último partido en el Di Stéfano– y Rocío. Por los carriles aparecían Athenea y Olga, mientras que en el centro del campo aparecían Teresa, Zornoza y Oroz. Por su parte, arriba estaba la dupla formada por Asllani y Esther.
Empezaron apretando las locales ante un Villarreal que no se jugaba nada, pero que empezó a soltarse tras el primer intento de arreón madridista. De hecho, dispusieron de la primera ocasión clara del partido, que estuvo a punto de acabar dentro de la portería de Misa. Para entonces el Barça ya ganaba 2-0 al Atlético, lo que les daba la oportunidad de ser terceras con un gol.
Lo intentaban las blancas por medio de Athenea, que era un filón por el perfil derecho. Encontró el Madrid la forma de hacer daño al conjunto amarillo y todos los balones iban para ella, pero no conseguían materializar. Fue al borde del descanso cuando consiguieron ponerse por delante en el marcador.
Asllani se iba de su marcadora en el área cuando recibió una falta clarísima que no fue señalada por la árbitra, pero sí que pitó el que cometió Tajonar –la portera del submarino– en la misma jugada, cuando Esther le robó el balón. La sueca fue la encargada de tirarlo y transformando, poniendo a las madridistas con pie y medio en la próxima Champions.
Con la victoria encarrilada, Toril metió en la segunda parte a Kaci y Moller, por Esther y Teresa. El partido bajó en ritmo e intensidad, pero las madridistas siguieron buscando el gol. Un segundo que pusiese definitivamente el broche de oro a la remontada de los últimos meses. Pero no llegó, e incluso comenzó el runrún en el Di Stéfano cuando el Atlético recortó distancias, con más de 20 minutos aún por delante.
En ese tiempo que se les hizo eterno a las blancas, apretó el Villareal y obligó a Misa a lucirse en una acción en la que evitó el empate. Al final, no varió nada. Las blancas mantuvieron su victoria por la mínima, mientras que en el Johan Cruyff acabó imponiéndose el Barça, pese al intento en los minutos finales de las rojiblancas. Al final, el Real Madrid termina la Primera Iberdrola con 60 puntos y volverá a estar en la Champions, mientras que las rojiblancas caen a la cuarta plaza con 59 puntos.
