Peor inicio imposible. El Real Madrid ha perdido con el Partizan de Belgrado en el inicio de los ‘playoffs’ de la Euroliga (87-89) y además ha sufrido la lesión de Walter Tavares, a falta de saber la gravedad y si el pívot podrá disputar el segundo capítulo. Un triple de Kevin Punter (26 puntos) a falta de cuatro décimas resolvió un duelo muy igualado donde no bastó la fe de Gaby Deck (24). Zeljko Obradovic golpea primero en su antigua casa y deja en posición peligrosa al equipo de Chus Mateo.
Mateo y Obradovic empezaron su larguísima partido de ajedrez dejando a Musa y Lessort, respectivamente en el banquillo. El serbio golpeó primero con su movimiento, ya que Smailagic ocupó la pintura en su equipo y se dedicó a martirizar a Tavares desde el perímetro. Tres triples sumó en el primer cuarto el ex pívot de Golden State Warriors y a su chepa se subió el Partizan para irrumpir en estos ‘playoffs’ (6-14).
Necesita espabilar el Madrid y a la tarea se puso el que nunca se arruga: Deck. Qué bendición es el argentino, siempre útil, trabajando lo gordo y lo fino de forma indistinta. A su amplio repertorio ha sumado esta temporada un juego letal de espaldas y 9 puntos con su firma devolvieron a los locales al duelo mientras Obradovic se desgañitaba pidiendo calma a sus jugadores. Tablas al final del primer cuarto (22-22).
La ola buena le duró al Madrid al inicio del segundo cuarto y la cabalgó para sumar un parcial de 8-0 que amenazó con romper el partido (30-22). Rugía el Palacio agitando las banderitas reservadas para las grandes ocasiones. Se hacen esperar estos duelos, pero cómo gustan cuando llegan. En el momento más inoportuno, cuando la fiesta parecía despegar, se enredó el equipo en varias pérdidas. Dos de ellas faltas en ataque de Dzanan Musa, que se fue al banquillo con tres personales y cero puntos. Cortocircuito en el día menos indicado.
En la confusión emergió la figura de Kevin Punter, que volvió a castigar un mal endémico del Madrid esta temporada: sus problemas en la posición de base. El estadounidense desenfundó la metralleta y anotó 13 puntos en el segundo cuarto a más gloria de los ruidosos aficionados del Partizan (39-46). El Madrid llegaba al descanso con deberes y Tavares en más de 19 minutos jugados (44-48).
Deck no basta
El africano corría serio peligro de extenuación si Mateo no lo sentaba un rato. Qué inoportuna esa apendicitis de Poirier… Así sucedió y el recurso fue colocar a Yabusele de pívot puro. El francés se lo tomó a pecho y se lanzó a por una pelota que hizo retumbar el pabellón. Volvía el partido a una temporada agradable para el Madrid, calentito pero sin locuras. Con un triple de Causeur recobraba el mando del marcador (56-55).
También volvía a cancha el esperado Musa para anotar sus primeros puntos de forma acrobática. Su equipo lo necesitaba para buscar la victoria, pero era Yabusele quien volvía a levantar al respetable con un mate. El duelo transitaba muy igualado, puros ‘playoffs’, en línea con esta Euroliga tan equilibrada durante todo la temporada. Solo un punto de diferencia antes del parcial definitivo (64-63).
Musa descorchó el último cuarto con un triple y varios gritos de rabia que encendieron al Palacio. Que se note que el Madrid también tiene a su balcánico. Tavares seguía viéndolo desde el banquillo y con el chándal puesto tenía poca pinta de volver… Tocaba rematar la faena sin un solo ‘5’ sano. Obradovic a lo suyo, estrellando la pizarra contra el suelo. Y Deck igual en su faena anotadora. El argentino las metía de todos los colores y pintaba el partido de blanco a falta de cinco minutos ante un rival aturdido (77-70).
Pero rematar a un equipo de Obradovic es tarea harto complicada. Avramovic y Punter, que llevaba toda la segunda parte desaparecido, volvieron a la carga y dejaron el duelo en un brete empezado ya el minuto 38 (79-77). Lessort, Deck y Yabusele tuvieron que ir al banquillo casi al mismo tiempo, los tres sangrando. Una buena muestra de la intensidad. Y entonces llegó el ‘3+1’ de Punter que volvió a ponerlo todo patas arriba (80-81).
La sangre fría ganaría un duelo muy caliente. El Madrid buscaba héroes y William-Goss se inventó una penetración que devolvió la igualdad (84-84). Tiempo muerto, 53 segundos y balón para los locales, pero Musa cometió su ¡tercera falta en ataque! al soltar la pierna y patear a Punter en un lanzamiento. El estadounidense acertó sus dos libres. Deck respondió con un ‘2+1’ sabor a gloria. El Partizan tendría la última posesión, 21 segundos con 87-86 en el marcador. Punter se vistió de verdugo para anotar un espectacular triple que finiquitó la contienda. El último intento a la desesperada de Hezonja no tocó ni el aro y el Madrid tendrá que remar mucho para llegar a Kaunas.
