El Real Madrid se mantiene en el triple empate al frente de la Liga Endesa después de derrotar con mucha superioridad al Fuenlabrada en el pabellón Fernando Martín (78-102). En la jornada de los derbis programada este fin de semana por la competición nacional, el equipo blanco no tuvo piedad de su vecino y mantuvo el ritmo de Barcelona y Baskonia, que tampoco fallaron en sus respectivos encuentros frente a Joventut de Badalona y Bilbao Basket.
Se presentaba muy desigualado el derbi entre líder y colista y en cuanto la pelota se puso en juego empezó a cuajar esa paliza que hacía presagiar el vistazo a la clasificación. Simplemente, no hubo partido entre un equipo desahuciado, que ya encadena la friolera de 17 derrotas consecutivas y cuya permanencia se antoja cada vez más complicada, y uno de los principales aspirantes al título.
Con un parcial de 13-29 en el primer cuarto, el Madrid puso tierra de por medio y no concedió ni una migaja de esperanza a un rival que se sabía inferior y que concentró sus esfuerzos en que la tunda fuera lo menos dura posible. La distancia final fue de unos ‘aceptables’ 24 puntos principalmente porque los visitantes tampoco ganaban nada haciendo sangre.
El día era perfecto para el lucimiento de jugadores de la segunda unidad y en ese escenario supieron recoger el guante los franceses Fabien Causeur (22 puntos) y Vincent Poirier (16), máximos anotadores del Madrid. El escolta y el pívot reemplazaron a la perfección a Dzanan Musa y Walter Tavares, que jugaron pocos minutos y ganaron algo de frescura con vistas a otra exigente doble jornada de Euroliga: el miércoles frente al Fenerbahce y el viernes contra el Partizan de Belgrado.