La situación del Real Madrid de baloncesto de cara a la próxima temporada depende, en cuanto a objetivos y planificación, de la decisión de un jugador y sus alternativas. Facundo Campazzo ya le ha comunicado a la entidad su deseo de enrolarse en una nueva aventura en la NBA y se encuentra a la espera de considerar las propuestas existentes y dictaminar si alguna, antes de su oficialidad, es lo suficientemente atractiva como para acometer el pago de su cláusula.
A día de hoy y desde que asimilaron la decisión de Campazzo de priorizar la NBA, la postura del Real Madrid es la de asumir la posible marcha de su estrella, pero ya le han pedido que decida cuanto antes, en pos de poder encontrar un sustituto de garantías para la próxima temporada. El mercado de agentes libres en la NBA abrirá en octubre, debido a los retrasos de competición ocasionados por la pandemia, y en esa fecha, en caso de que el Facu no siga en el Madrid, los blancos deben tener un base que le reemplace.
El problema es de tiempos, y a la vez de dinero. El Real Madrid no quiere hacer grandes inversiones en un año en el que el coronavirus ha obligado al club a hacer un esfuerzo, para el que también colaboraron los jugadores y técnicos de las secciones de fútbol y baloncesto, y no acometerá, salvo necesidad imperiosa, una contratación de máximo nivel –deportivo y económico– si Campazzo no sale. Abalde y Zizic, que sí eran necesarios u oportunidades de mercado a ojos de la directiva, completan ese cupo.
Sin embargo, una decisión definitiva de Campazzo en las próximas semanas podría desbloquear el embolado. En caso de quedarse, todo habría quedado en un susto que, eso sí, podría regresar la próxima temporada. Pero sí confirma su marcha, el Madrid contaría con un dinero proveniente de su cláusula de salida –seis millones de euros–, además de los tres kilos anuales de salario del Facu. De darse esta opción, el Real Madrid estaría abierto a facilitar el pago de la cláusula del base.
El sustituto depende del Facu
Las opciones de mercado del Real Madrid son escasas, pero en el club se están moviendo para poder reemplazar a Campazzo en caso de un desenlace negativo. La situación, cada semana que pasa puede complicarse más, ya que los bases que quedan en el mercado tienen opciones de firmar por otros equipos –caso de Sloukas– y el Madrid aún no puede lanzarse con todo a por ellos sin la decisión final –y el dinero– de Campazzo.