Los días de Pablo Laso al frente del Real Madrid de baloncesto han llegado a su fin de forma abrupta. El técnico vitoriano reflotó una sección a la deriva cuando llegó en 2011 y desde entonces ha sumado la friolera de 22 títulos con la sección blanca, incluidas dos Euroligas. Estos méritos no han sido suficientes para todo el mundo que tiene mando en el equipo.
Aprovechando los problemas de salud de Laso, el máximo responsable de la sección Juan Carlos Sánchez propuso que Chus Mateo –el segundo entrenador del equipo– se haga cargo esta próxima temporada del Real Madrid mientras Pablo se recupera. En el entorno del técnico, esta sugerencia no fue recibida de buen grado porque consideran que se está exagerando la gravedad de los problemas de salud del técnico. «Está como un roble», afirman.
Juan Carlos Sánchez lleva mucho tiempo de guerra soterrada con Laso, pero el pulso actual ha terminado con un desenlace inesperado para muchos. Es de sobra conocido que el vitoriano llegó como segunda opción al banquillo blanco en 2011, luego en 2014 se salvó del despido en los días de luto por la muerte de Di Stéfano, el pasado verano hubo problemas para renovarle hasta 2023 y hasta este año Florentino Pérez sacó la cara por su gestión en los peores momentos del equipo allá por el mes de marzo.
La mala relación de Laso con Sánchez tenía como principal argumento que muchas veces sus peticiones en materia de fichajes no coinciden con lo que le trae el club. Tampoco existe una gran confianza personal entre los dos implicados y por si fuese poco siempre existe una lista de técnicos futuribles en caso de que Pablo no alcance el nivel esperado con el equipo.
El infarto de Laso antes de la final contra el Barcelona y el posterior triunfo con Chus Mateo al frente dieron la excusa perfecta a Juan Carlos Sánchez para reclamar su cuota de protagonismo. Pese a que el técnico no tenía la menor intención de abandonar el equipo, la decisión fue tomada desde arriba por todos estos motivos. Laso ya está buscando un nuevo equipo donde entrenar.
