El Real Madrid jugará la cuarta final de la Liga Endesa tras cargarse al Barcelona por la vía rápida en las semifinales (0-3). El tercer partido fue el más duro para los blancos (92-95) y no se resolvió hasta los últimos segundos del cuarto parcial, en los que Facundo Campazzo (21 puntos y seis asistencias) fue decisivo con dos canastas seguidas para deshacer el empate y lograr la remontada en el mejor encuentro del Barça en la serie.
Los catalanes lo intentaron hasta el último momento y fueron mejores en el segundo y tercer cuarto, pero el campeón cayó en el Palau Blaugrana, donde los blancos no habían ganado ninguna vez antes esta temporada. Jabari Parker se marchó al vestuario con 25 puntos y por cosas del baloncesto en la segunda sólo anotó dos. Así se fraguó otra nueva oportunidad de levantar el título para el Real Madrid, que ya espera rival entre UCAM Murcia y Unicaja Málaga (2-1 en la serie).
El Real Madrid sacó el rodillo en un primer cuarto en el que hundió a los de Roger Grimau con un cinco de siete en triples por cero de cuatro del Barcelona. En la anotación, Campazzo dirigió y Guerschon Yabusele se desmelenó. Ellos fueron los más destacados del conjunto madridista, que quiso encarrilar su tercer triunfo de la serie lo antes imposible (20-28). Otra vez más, el Barça se obligaba a remontar a un martillo blanco que esta semana no ha dejado de golpear.
Pero el equipo culé despertó y reaccionó. No le quedaba otra. Parker y Willy Hernangómez se pusieron en dobles dígitos anotadores y colocaron a los suyos muy cerca en el marcador (45-49). Si en el primer cuarto fallaron todos los triples que intentaron, en el segundo firmaron un pleno al cinco desde el exterior entre el estadounidense y el español. Otra nota positiva para el Real Madrid fue la descalificación de Jan Vesely, máximo anotador del segundo choque, a ocho minutos del descanso por una antideportiva y una técnica.
El Real Madrid gana al Barcelona y pasa a la final
El Barça siguió apretando hasta ponerse por delante en el tercer cuarto, su mejor momento en toda la serie y sobre la bocina Ricky Rubio estiró la máxima de los suyos con un triple (76-72) y puso en pie al Palau, que se lo empezaba a creer. Los de Grimau mandaban en el encuentro y Parker arrancaba el último parcial con la friolera de 25 puntos, mostrando realmente una versión de estrella que el WiZink Center le impidió.
Parker seguía a lo suyo, pero el Real Madrid puso una marcha más y el partido llegaba empatado a 4:36 del final. Se volvió a parar a 1:17 (90-90) por un triple invalidado a Nicolás Laprovittola por falta anterior en la jugada y todo llegaba vivo a los últimos 60 segundos. Final en juego y dos canastas seguidas de Campazzo, la primera bailando a Willy para sentenciar al Barça.
La épica y el suspense duraron hasta el último instante, pero los blancos se ganaron el derecho a volver a pelear por la Liga y conseguirla dos años después. Además, lo hicieron dejando en la lona a su verdugo del curso pasado en la final en su propio pabellón, donde mostraron la mejor cara de toda la serie, pero ni por esas fueron capaces de derrotar por un sólo partido a este gran Real Madrid.