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Limpieza

Ni lejía ni cloro: el sencillo truco que recomiendan los profesionales para limpiar tu piscina en verano

Con la llegada del calor, la piscina se convierte en un espacio de uso frecuente. Por eso, limpiar tu piscina y mantenerla en condiciones óptimas es esencial, pero requiere constancia y técnica. A pesar de que lo recomendable es realizar un mantenimiento durante todo el año, la realidad es que muchas veces no se le presta la atención necesaria hasta que llega el verano.

Cuando se llega a este punto, es indispensable poner manos a la obra para garantizar la salubridad del agua. Y es que, limpiar la piscina no solo implica el uso de productos químicos, sino también una serie de prácticas que evitan que se acumule suciedad, alterando así el equilibrio del agua.

Así es el truco que recomiendan los profesionales para limpiar tu piscina

Uno de los primeros pasos para limpiar tu piscina es retirar todo aquello que haya caído en la superficie o el fondo. El viento, la vegetación cercana, los insectos que se ahogan (como las avispas) y el uso diario hacen que el agua acumule impurezas que deben eliminarse de forma continua.

A continuación, estos son los pasos clave para eliminar hojas y restos:

Y para tales tareas, estas son las herramientas recomendadas:

Cómo limpiar la piscina de manera profunda y regular

Para limpiar tu piscina de forma eficaz es importante dividir las tareas en dos niveles: el mantenimiento regular y la limpieza profunda.

Por empezar, debería tener una limpieza regular (mínimo una vez por semana):

Posteriormente, se debe acudir a una limpieza profunda (una vez al mes):

La alternativa para mantener el agua de tu piscina sin cloro ni lejía

Entre las recomendaciones de los profesionales, una destaca por su sencillez: el uso de peróxido de hidrógeno, también conocido como agua oxigenada en concentraciones superiores.

Este producto, empleado correctamente, es capaz de desinfectar el agua sin generar residuos tóxicos ni provocar irritaciones, como ocurre con el cloro o la lejía.

Estas son algunas ventajas del peróxido de hidrógeno:

Se utiliza una concentración específica (generalmente al 35%) que debe dosificarse correctamente según el volumen de la piscina. Se recomienda medir los niveles con kits especiales y aplicarlo en momentos de baja exposición solar, para evitar la rápida evaporación del compuesto.