Seguimos hablando de nuevas incorporaciones al panorama gastronómico de la capital. Aunque parezca complicado, sigue ocurriendo, seguimos sumando restaurantes. Esta vez hablamos de un local en el Barrio de Salamanca, un restaurante que abre con el sello del chef Marco Carboni.
Para quien no conoce a Carboni, es uno de los chefs que ha formado parte del equipo de Massimo Bottura -además de trayectorias en Londres o Nueva York-, una experiencia excepcional que se nota en cada uno de sus restaurantes.
Porque el cocinero, originario de Módena, tiene multitud de locales en México: Polpo, Bottega, Vinos Chidos, Cucina, Sete, Sartoria… Todos ellos dentro del Grupo Sartoria.
A todos ellos hay que sumar Hermosilla, la nueva incorporación de Marco Carboni en Madrid. ¿Ese nombre? Se debe a la calle donde se encuentra el local, en el tramo de Hermosilla entre Serrano y el Paseo de la Castellana. Una ubicación sin duda, inmejorable. Y desde fuera, se palpa ese espíritu de restaurante que va a triunfar.
¿Un detalle a tener en cuenta? Se encuentra en un edificio del arquitecto Gutierrez Soto, algo que ha sido respetado desde los inicios por los artífices del interiorismo, el estudio Plantea.
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Grandes ventanales, mobiliario de madera, mesas de mármol, ficus de gran tamaño, luz cálida… Y un espectacular horno al fondo del restaurante donde podemos disfrutar de sus deliciosas pizzas y flat breads.
Pero en Hermosilla hay muchos más platos que degustar, porque Carboni -a pesar de sus raíces italianas- es un gran experto en ceviches, grills y fermentados.
Pero Hermosilla no es ni mexicano ni italiano, es un proyecto gastronómico internacional donde vamos a estar felices todos. Eso sí, también se nota el sello de su socio, el chef Alberto Ituarte, que ha trabajado en los fogones con Andoni Luis Aduriz, entre otros.
¿Platos a tener en cuenta? Almohadillas con paletilla de ibérico, parmigiano y balsámico; flat bread con cremoso de hongos, manchego y hierbas frescas; ceviche ligero de corvina con caldito de hierbas mediterráneas y aceite de chile verde; milhojas de berenjena búfala y migas crujientes; arroz de langostinos, azafrán, ajo dulce y piquillo… ¿Otra cosa que nos gusta? Que apuestan por marcas locales como Cientotreintagrados o Formaje.
¿Conclusión? Hermosilla es un restaurante con tintes mediterráneos y muy buen gusto. Uno de esos sitios en los que hay que reservar mesa pronto. Merece la pena.
