Un sueño para el Atlético Baleares, un marrón para el Mallorca

Dos equipos mallorquines estarán el próximo viernes en el sorteo de los octavos de final de la Copa del Rey. Es una gesta histórica, pero no inédita, ya que en 1987 el Mallorca y su filial, el Mallorca Atlético, alcanzaron los cuartos de final. Para el Atlético Baleares sí es la primera vez que se llega a semejante escalón y para ellos es un sueño. Para el Mallorca, inmerso en la lucha por la permanencia, es en cambio más un marrón que otra cosa.

Nunca en su historia había llegado tan lejos en la Copa del Rey el Atlético Baleares, que ha obrado además la gesta de eliminar a dos equipos de Primera División. Primero fue el Getafe el que cayó goleado en el Estadio Balear 5-0, mientras que ayer el que mordió el polvo fue el Celta, que venía de ganar en el Benito Villamarín al Betis y que hace pocas semanas arrancó un empate a cero de Son Moix.

El equipo de Xavi Calm sueña con que esta vez sí le toque en el sorteo uno de los grandes del fútbol español. Desde luego su rival será un equipo de Primera División y existen muchas posibilidades de que se trate de uno de los más llamativos. Por supuesto el premio gordo lo constituyen el Real Madrid o el Barcelona, aunque tampoco se le harían ascos a equipos como Sevilla, Atlético de Madrid (los dos juegan hoy jueves) o Valencia.

Existe también la posibilidad de que los blanquiazules queden emparejados con el Mallorca, lo que garantizaría la clasificación de un equipo mallorquín en cuartos de final. La última vez que se dio un derby semejante en Copa fue el 13 de noviembre de 1986, a partido único también y en el Estadio Balear. En aquella ocasión el Mallorca necesitó llegar a la prórroga para imponerse 2-4, después de haber llegado 1-1 al final del tiempo reglamentario.

Para el Mallorca, en cambio, la Copa es más un marrón que un objetivo. El equipo de LGP está inmerso en la lucha por la permanencia y no le sobran efectivos para dedicarlos a dos competiciones. Por supuesto luchará por llegar cuanto más arriba mejor, pero caer eliminado en la siguiente ronda, en la que posiblemente se enfrentará a otro Primera División -también a partido único- no sería ningún drama.

Los rojillos se preparan ahora para enfrentarse el próximo sábado al Levante en Orriols, en el primer partido de la segunda vuelta. El Levante es el único equipo de Primera que aún no conoce la victoria, pero todos son conscientes de que el encuentro va a ser muy difícil. La preocupación, además, es saber si el entrenador podrá contar con Valjent.