El ‘resurgir’ de Carlota Casiraghi que ha dejado en la sombra a Charlene

Las últimas semanas están siendo muy intensas para la Familia Grimaldi con motivo de las celebraciones del centenario del nacimiento del príncipe Rainiero. Una ocasión única en la que el príncipe Alberto, su esposa, sus hermanas, y sus sobrinos están poniendo todo de su parte para festejar al anterior jefe del Estado y que nos está dejando imágenes poco habituales entre los Grimaldi. No es nada frecuente ver a las princesas Carolina y Estefanía juntas, y mucho menos con Charlene, con la que siempre se ha dicho que la relación es tensa. Sin embargo, en los últimos días, el clan Grimaldi ha proyectado una imagen de unidad, precisamente por el recuerdo de Rainiero.

Han sido varios los actos en los que las hermanas del soberano y su esposa han coincidido y han mostrado una imagen cordial y afable, pero también han participado en compromisos en solitario. Como es lógico, las comparativas en los actos en los que han coincidido han resultado inevitables, sobre todo en el caso de Charlene y Carolina, aunque también se han sucedido en sus apariciones privadas, muchas de las cuales han estado de alguna manera vinculadas al aniversario de Rainiero.

A pesar de que Charlene ha retomado su actividad por completo tras una etapa complicada marcada por sus problemas de salud, la realidad es que la Princesa sigue estando, en cierta medida, a la sombra de su cuñada. En los actos en los que se las ha visto juntas, salvo que estuvieran presentes los hijos menores del príncipe Alberto, todas las miradas se han dirigido a la princesa de Hannover, que sigue siendo una auténtica maestra en captar la atención y rendir homenaje al Principado a través de sus looks. Algo que Charlene por ahora no domina de la misma manera.

Hace unos días, la esposa del príncipe Alberto visitaba el Hospital Princesa Grace y mostraba su faceta más tierna en la Unidad de Maternidad pero, este acto de la Princesa ha pasado prácticamente desapercibido por otros compromisos relacionados de forma directa con la princesa de Hannover y su hija mayor, que ha ganado protagonismo en los últimos días. Una desviación de la atención involuntaria pero para muchos inevitable que además, contrasta con la buena relación que sí que hay entre Charlene y Carlota Casiraghi.

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Aunque Carlota Casiraghi ni es princesa ni tiene un papel oficial en la estructura del Principado, es una de las figuras clave de los Grimaldi, que además es el máximo exponente del glamour de Mónaco. Además de su faceta como imagen de la firma Chanel, la hija mayor de Carolina es una intelectual y una apasionada de la Filosofía -carrera que estudió en la prestigiosa Universidad de La Sorbona-. De hecho, es autora de un tratado filosófico junto al profesor Robert Maggiore.

Esta semana, la sobrina de Alberto de Mónaco se ha convertido en protagonista por partida doble, por asistir con su madre a la inauguración de una muestra en el Nuevo Museo Nacional de Mónaco y por participar, junto al soberano, en la presentación de la Semana de la Filosofía de Mónaco. Carlota Casiraghi y el príncipe Alberto han acudido a un debate que se ha celebrado en el exterior del Palacio Grimaldi en el que se ha tratado el tema de la ecología, una cuestión con la que el soberano está muy implicado.

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Sin duda, dos apariciones públicas muy seguidas que han puesto a la hija mayor de la princesa de Hannover de nuevo en el foco mediático, a pesar de que Carlota prefiere mantener un perfil bajo, alejada de la prensa. Sin embargo, la esposa de Dimitri Rassam sigue siendo uno de los grandes activos del Principado, al igual que su madre, y en muchas ocasiones, por encima de los Grimaldi titulares.