Vicky Martín Berrocal se revela contra los cuerpos perfectos
Vicky Martín Berrocal ha hecho un gran alegato a favor de la aceptación de una misma y ha utilizado una imagen de Jennifer Lopez para ello
Vicky Martín Berrocal es un gran ejemplo para muchas mujeres, pues además de ser una diseñadora de éxito, es una mujer muy segura de sí misma y con las ideas muy claras. Esto ha vuelto a quedar claro con su última publicación en las stories de Instagram, en la que se ha revelado contra los cuerpos perfectos y ha lanzado un alegato a favor del amor propio y la autoaceptación.
Esta es la storie de Vicky Martín Berrocal / Gtres
Para ilustrar su ejemplo ha utilizado una fotografía de la cantante Jennifer Lopez en la que aparece luciendo el famoso vestido verde de Versace, con el que consiguió dar la vuelta al mundo. “Sé lo que estáis pensando… La bomba, ¿verdad? Te encantaría tener ese cuerpo, el pelo, el éxito y todo… ¡Porqué no! Soñar es gratis y admirar es maravilloso, pero… Quiero contarte algo que deberías tener en cuenta”, comienza escribiendo la madre de Alba Díaz.
“¡Mujeres así, son mujeres que tienen una carrera profesional donde la imagen es parte muy importante! En tu caso, ¿también lo es? Y algo más… Cuerpos así hay muy pocos, ¡lo que pasa es que solo vemos lo que nos enseñan!”.
Vicky Martín Berrocal ha utilizado este look de Jennifer Lopez como ejemplo para su alegato / Gtres
“La realidad es otra, amigas mías, y que no te cuenten historias. La mujer tiene celulitis, la que no tiene, tiene flacidez, y la que no, ¡un poco de todo! Para conseguir estar como lo que ves y con esa edad deberíamos estar a régimen de por vida. (No estoy dispuesta). Nacer tres veces más (eso no me importaría), y pasarnos la vida en un gimnasio. ¿¡Y!? ¿Eso te compensaría? ¿Serías más feliz? ¿Harías más feliz a los tuyos?”, continúa Vicky.
“Y con esto no quiero que os confundáis. No quiero decir que cuidar la alimentación y hacer deporte no sea maravilloso, que lo es, ya saben que a mí me gusta cuidarme mucho, ¡pero recuerden que cada una es lo que es! ¡No te olvides! ¡No te obsesiones! ¿Te imaginas que después de leer esto, que no sé ni porqué lo escribí, te mirases al espejo y empezara a gustar lo que tú ves? ¡Tú! ¡Gústate tú!”, sentencia.