El año más agridulce de Kiko Rivera: de su éxito profesional a su ‘soledad’ familiar
Kiko Rivera ha hecho balance en las redes sociales de los mejores y peores momentos de los últimos meses
Al mismo tiempo que ha conseguido ser número uno en Spotify, ha vivido un año alejado de toda su familia
«Deseando que acabe este 2023. Que aunque ha tenido algunas cosas buenas no ha sido un buen año para mí, demasiados sustos para mi cuerpo. Ahora a lograr mi mejor versión para este 2024. Va a ser un gran año y con mucha musiquita». Con estas palabras, Kiko Rivera quiso ha querido hacer un balance en sus redes sociales en la cuenta atrás para finalizar el año. Dicho mensaje deja entrever que al mismo tiempo que ha vivido éxitos en su carrera profesional, también ha experimentado ciertos episodios desagradables que prefiere olvidar de cara al próximo año que está a punto de comenzar.
El Mambo ha sido el último tema que ha lanzado de su discografía y, aunque en un principio no logró un éxito arrollador, lo cierto es que con el paso de los meses logró posicionarse en el puesto número uno en Spotify de las canciones más escuchadas en España (con más de 25 millones de reproducciones). De hecho, si analizamos los datos que han trascendido del hit, podría decirse que se ha convertido en todo un fenómeno viral del año. «Muchísimas gracias, los sueños también se cumplen, y esto es gracias a vosotros», manifestaba en su perfil oficial de Instagram tras conocer los beneficios que había obtenido con su último proyecto musical.
Kiko Rivera / Gtres
Distanciamiento familiar
No obstante, al mismo tiempo que el 2023 ha marcado un antes y un después en su trayectoria sobre los escenarios, Kiko también ha continuado con la guerra familiar que comenzó hace ya dos años tras enterarse de puntos que no conocía sobre la herencia de su padre. Y es que tal y como contó durante la emisión de Cantora, la herencia envenenada, descubrió que su madre había ocultado durante años los trajes de luces de Paquirri, algo que fulminó por completo la relación de madre e hijo.
Desde entonces, el DJ no ha vuelto a retomar la relación idílica que en su día tenía con su progenitora, ya que ha preferido alejarse de todo lo vinculado con el clan para centrarse en él y en su mujer e hijos. Esta mala relación ha llevado a Isabel Pantoja a realizar un cambio en su testamento, donde ha sacado tanto a su hijo como a Isa P como herederos, dejándoles tan solo la estricta legítima, según informó Antonio Rossi.
Kiko Rivera e Isabel Pantoja en el plató de ‘Supervivientes’/ Gtres
Pero, Isabel Pantoja no sería el único frente familiar que ha tenido este año Kiko Rivera, y es que con su hermana tampoco mantiene ningún tipo de relación a día de hoy. Prueba de ello ha sido su ausencia en la boda de la mencionada, a la cual tan solo acudió Anabel Pantoja, su prima, como invitada de la familia.
Revés de salud
Más allá de sus rencillas familiares, Kiko Rivera también ha atravesado diferentes sustos en cuanto a su salud. El pasado mes de julio se sometió a una operación a corazón abierto, de la que él mismo habló en sus redes sociales asegurando que «todo había salido bien». Esta intervención vino tan solo unos meses después de que sufriera un ictus, uno de sus peores varapalos de salud de su historial médico.