Investigación
John McAfee

Un médico amigo de John McAfee: «Dudo que se suicidase, me gustaría ver las evidencias»

John había "pisado los pies" a mucha gente recuerda su amigo Charles Nader

"Hablaba como si la vida fuese un videojuego", asegura el doctor Nader

Charles Nader, CEO de doc.com, médico y uno de los amigos más íntimos de John McAfee ha hablado con OKDIARIO sobre el supuesto suicidio del fundador y creador de uno de los softwares antivirus más importantes de los últimos tiempos y asegura que “dudo que se suicidase, me gustaría ver las evidencias».

McAfee era en la actualidad un cotizado influencer, además del creador del antivirus que lleva su nombre, especialista en criptomonedas cuyas opiniones alzaban o hundían en la cotización cualquier moneda de este tipo y estaba preso en España desde octubre de 2020, por una orden de detención emitida por Estados Unidos. El 15 de octubre había dejado escrito en sus redes sociales, como si fuera una macabra premonición: «Estoy contento. Tengo amigos. La comida es buena. Todo está bien. Sepan que si me cuelgo, a lo Epstein, no será culpa mía».

La de McAfee podría ser la vida de un genio a caballo entre el siglo XX y el XXI, con la grandeza que da tener una mente privilegiada para los negocios y la locura que proporciona el consumo de drogas como el MDM o la cocaína. Sin embargo, esa vida quedó truncada el pasado miércoles en una celda del Centro Penitenciario de Brians 2 (Sant Esteve Sesrovires), en Barcelona. Tras graduarse comenzó a trabajar en la NASA y luego en las  empresas tecnológicas más importantes de Estados Unidos, hasta que en 1987 inventó en antivirus informático que lleva su apellido. Se hizo multimillonario, se arruinó unas cuantas veces y se enriqueció las mismas. Durante 30 años estuvo curado de las drogas, pero los últimos años vivió rodeado de mujeres, hombres armados y de nuevo, drogas.

John McAfee, de 75 años, había sido detenido en octubre de 2020 en el aeropuerto de El Prat, en Barcelona, cuando se disponía a tomar una conexión de un vuelo a Estambul y desde entonces estuvo en prisión preventiva respondiendo a una orden de búsqueda y captura emitida por Estados Unidos vía Interpol. La Hacienda norteamericana le reclamaba por evasión de impuestos entre 2016 y 2018, derivados de todo el dinero ganado con su inversión en criptomonedas. Estados Unidos también le reclamaba por los años 2014 y 2015, pero en nuestro país pasados cinco años sólo se considera infracción administrativa, por lo que el auto de extradición que se dictó un día antes de su muerte podía ser recurrido. En realidad, a Estados Unidos le interesaba interrogarlo por su conocimiento de muchos asuntos turbios.

McAfee y Nader navegando en Las Bahamas.

Nader recuerda el día que recibió en su casa de Carolina del Norte la noticia de que se le reclamaban cantidades millonarias: «Yo estaba allí y lo primero que hizo fue decirme que me vendía la casa que le había costado 850.000 dólares por 400.000. Yo no quería una mansión así en mitad de la nada, en un pueblecito lejano y le dije que no, pero tenía claro que iba a huir, era muy paranoico, tanto él como su equipo, siempre iba con ex militares armados, se rodeaba de unas 25 personas, a las que mantenía todos los meses. No sólo a ellos, sino también en algunos casos a sus familias, les pagaba casas, coches y dejaba propinas de 100 dólares a las camareras. Era normal que los que le rodeaban le adorasen».

Esa generosidad no provocó la ruina económica, ni mucho menos, de John McAfee: «Él siempre dijo que todo había sido una trampa de Jimmy, su mano derecha, al que la Hacienda norteamericana pilló y entonces habría vendido a John a cambio de quedar libre. En cualquier caso, McAfee había pisado los pies a mucha gente».

El excéntrico millonario británico de nacimiento, aunque siendo pequeño la familia se trasladó a Estados Unidos, fue pionero de muchos de los usos que manejamos hoy en Internet, como del concepto Premium, al ofrecer por vez primera un producto gratis (su antivirus) durante un tiempo con posibilidad de renovarlo pagando una pequeña cantidad. McAfee se codeó con gente como Lawrence Ellison, fundador de Oracle y Steve Jobs, de Apple o Satoshi Nakamoto, inventor del bitcoin, con el que llegó a compartir veladas náuticas en Europa. Vendió toda su participación en la empresa a Intel, dicen que por unos 6.400 millones de euros y se reinventó en el negocio de las criptomonedas.

«Siempre decía que el dinero era la herramienta, pero que para llamar la atención de los medios debía ser muy excéntrico», recuerda Nader y relata una anécdota desconocida de McAfee: «Hasta 2000 ó 2005 él pasaba al menos dos semanas como homeless (vagabundo) en una ciudad diferente de Estados Unidos cada año, decía que esa era la mejor manera de poner los pies en la tierra. Me contaba que siendo invisible para la gente podía estudiar mejor lo que la gente quería y sus problemas y me decía que lo probase alguna vez en la vida, pero yo no quise hacerlo aunque quizás en el futuro sí me decida. Sé que aceptó nuestro proyecto y promover nuestra empresa porque tiene un gran componente social y eso le llamó la atención. Se me hace extraño que alguien tan fuerte como para ser capaz de vivir como un mendigo en las calles pueda ahorcarse en una celda».

Comienza su exilio

Tras recibir la amenaza de la Hacienda de Estados Unidos McAfee comenzó una huida rocambolesca, que le llevó hasta Belice, un pequeño país a 200 kilómetros de México. Allí montó un resort para los turistas norteamericanos, parecido al que había en las montañas de Colorado donde ofrecía clases de yoga y meditación a los visitantes, pero poco después comenzaron los incidentes y las quejas vecinales, hasta que su vecino fue encontrado muerto en su lujosa mansión y McAfee huyó a Guatemala, donde fue detenido y extraditado a Estados Unidos, que lo puso en libertad.

Corría el año 2008 y todavía Hacienda no lo buscaba. En 2015 fue detenido por conducir ebrio cerca de su casa de Carolina del Norte y un año después inició la carrera presidencial de Estados Unidos, que tuvo que abandonar después de no ser elegido candidato en las primarias del Partido Libertario. Entonces decidió irse a Las Bahamas y casarse con su última esposa. Estuvo una temporada en Cuba, pero fue detenido tras atracar el yate en el que vivía en República Dominicana en 2019 y luego puesto en libertad. Desde Cuba escribió el 9 de junio de 2019: «He recopilado archivos sobre la corrupción de los gobiernos (…) Comenzaré con un agente corrupto de la CIA y dos funcionarios de Bahamas. Si me arrestan o desaparezco se entregarán a la Prensa más de 31 terabytes de datos incriminatorios». Quizás fuese este  famoso deathswitch que afirmaba poseer. Pero después comenzó entonces su periplo por Europa que acabó con su detención en Barcelona y posterior ingreso en prisión.

Una deathswitch como seguro

La historia de esta famosa información importante también llegó hasta Nader que cuenta que John McAfee «sabía que lo iban a extraditar a EEUU pero no estaba preocupado porque tenía un deathswitch (información recopilada para evitar su muerte) en algún lugar y que si le pasaba algo saldría a la luz información sobre el pago de los cárteles de la droga a políticos en Latinoamérica y funcionarios en EEUU…  Conociéndolo, no me extrañaría porque él siempre temía por su seguridad» y recuerda el CEO de doc.com una anécdota: «Cuando fui a verlo a Tennessee mandó a recogerme al aeropuerto como si fuera un Vip, con una furgoneta negra seguida de varios coches iguales, detrás de mí había un bazooka y eso lo había visto en México, pero para Estados Unidos me pareció exagerado, allí no existen los mismos problemas de seguridad. Me dijo que se sentía espiado y siempre estaban atentos a los drones que volaban cerca de la finca».

Charles Nader en la portada de Forbes.

¿Es posible que John McAfee haya sido ‘suicidado’ por algunos de estos carteles de la droga? Nader no conoce la respuesta, pero sabe que «John le pisaba los pies a mucha gente, tenía información privilegiada y por eso el Gobierno norteamericano lo quería interrogar. Hablaba como si la vida fuese un videojuego en el que mucha gente lo trató de extorsionar».

Sobre la causa de su muerte, por ahorcamiento, sostiene Charles Nader, que es médico aunque no ejerciente, que «no es fácil morir así, hay que saber hacer un nudo fuerte y se tarda mucho en morir, no se fallece de manera instantánea, por eso me gustaría ver las evidencias y no me cuadra con su personalidad, alguien que usaba Twitter y los medios de comunicación para llegar a tanta gente… estaba dispuesto a dar batalla legal en USA». Una pelea que ya no podrá disputar McAfee, mientras la autopsia tendrá que determinar la causa real de su fallecimiento. Ahora todas las hipótesis están sobre la mesa.