Iglesias teme el ‘pinchazo’: evita los mítines en los territorios ‘hostiles’ para Podemos
Pablo Iglesias quiere evitar la imagen de fracaso, que pueda contagiar la desilusión de cara al 28-A, eliminando de su ruta las capitales donde Podemos no cuenta con representación en el Congreso de los Diputados.
Pablo Iglesias quiere aparecer en campaña como el líder de masas, capaz de movilizar a la izquierda de forma multitudinaria. Ése es su deseo, y también su principal temor. De ahí que Podemos haya diseñado una campaña ‘estratégica’, eligiendo a conciencia los destinos en los que aparecerá su secretario general.
La formación pretende evitar imágenes de ‘pinchazo’ en las provincias donde el partido no cuenta con representación en el Congreso de los Diputados. Así, Iglesias no ha incluido en su plan de campaña ninguna provincia en la que su partido no cuente con un escaño en la actualidad. En consecuencia, territorios como Ceuta, Melilla, Soria, Ávila, Segovia o Palencia no contarán con la presencia del líder podemita.
En su lugar, el partido ha elegido lugares como Valencia, en los que cuenta con 5 diputados; Barcelona, con 9 o las islas. La intención: seguir mostrando la imagen de liderazgo insustituible de Iglesias.
Desde su vuelta, anunciada con un polémico cartel con el mensaje de ‘VUELVE’ y la sílaba ‘EL’ destacada en un tono más claro, Iglesias ha vuelto a tomar un papel protagonista mientras Irene Montero vuelve al segundo puesto.
El temor de la formación se ve reflejado en las encuestas. Por ejemplo, las del CIS, que deparan un desplome para los morados el próximo 28-A.
El nerviosismo se manifiesta en declaraciones de algunos de sus dirigentes e ideólogos, como Juan Carlos Monedero, que la pasada semana respondió al barómetro acusando a Tezanos de haber realizado la encuesta antes del regreso de Iglesias de su baja por paternidad.
«Si una encuesta tan cara como la del CIS se hace una semana antes de que se reincorpore el candidato de uno de los principales cuatro partidos, ¿no es tirar el dinero?”, publicó en su cuenta de Twitter. El mensaje generó polémica por el mal lugar en el que dejaba a Irene Montero, sustituta del secretario general de Podemos en este tiempo.
A pesar de las continuas luchas internas y la creación de grupúsculos críticos con su gestión, el secretario general continúa siendo el referente del partido por lo que su marcha podría significar la desaparición de los morados.
¿Y la España vaciada?
Podemos ha incluido en su programa electoral un paquete de medidas para que los pueblos y zonas rurales no se vacíen. A bombo y platillo, el partido de Pablo Iglesias ha asegurado que para ellos se trata de una prioridad de gobierno. Sin embargo, Iglesias también se ha olvidado de la ‘España vaciada’ en su campaña, que se centrará en grandes ciudades como Madrid o Barcelona.
¿Y la descentralización?
La formación morada se ha considerado a sí mismo como baluarte de la descentralización. En múltiples ocasiones, Iglesias y los suyos han defendido la descentralización del Estado y la importancia de delegar competencias a los distintos territorios.
Sin embargo, la campaña empieza y termina en Madrid. El partido dio el pistoletazo de salida en la capital y clausurará en el mismo lugar, siendo cómplices de lo que ellos denominan la centralización del Estado.
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