España

Más de 200 inmigrantes tratan de salir en barco desde Santa Cruz de Tenerife con rumbo a Huelva

Más de 200 inmigrantes de origen magrebí, que llegaron a las islas en los últimos días en pateras y cayucos, se encuentran en el puerto de Santa Cruz de Tenerife para intentar salir en un barco hacia Huelva, lo que al parecer no será posible debido a que carecen de la documentación necesaria.

Fuentes del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife han informado a Efe que estas personas han ido llegando esta tarde a la isla procedentes de Gran Canaria y esperaban poder coger el barco que sale a la 1:00 horas del puerto tinerfeño hacia Huelva.

Las fuentes han señalado que la documentación que portan los migrantes, en su mayoría marroquí, les permite moverse entre las islas y comprar incluso los billetes, pero no embarcar hacia la Península.

El alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, se ha trasladado hacia el puerto ante las numerosas llamadas vecinales en las que comentaban la concentración cada vez mayor de personas de origen magrebí en el centro de la ciudad.

Bermúdez ha indicado que si el Gobierno de Canarias o la Delegación del Gobierno no buscan alojamientos o permiten que estas personas puedan coger el barco hacia Huelva, pernoctarán en la calle.

Además ha afirmado que no entiende cómo la documentación que portan les permite moverse entre las islas pero no de las islas a la Península.

El edil se ha mostrado indignado ante el hecho de que ningún representante del Gobierno de Canarias, del Cabildo de Tenerife o de la Delegación del Gobierno se hayan presentado en el puerto y ha considerado que el tratamiento del Gobierno de España es inaceptable.

También ha alertado que ahora mismo Santa Cruz no tiene libre plazas asistenciales para acoger a estas personas.

Campamentos en Arguineguín

Sobre las 19.00 horas, cuatro guaguas conducían al antiguo polvorín del Ejército en las afueras de Las Palmas de Gran Canaria a 200 inmigrantes llegados en los últimos días en patera a la isla al campamento del que se espera que empiece a descongestionar el muelle de Arguineguín, donde anoche pernoctaron más de 2.300 personas.

Los recibían varias dotaciones de Policía y los funcionarios públicos encargados de hacer el primer reparto de tiendas.

Para los recién llegados, el cambio es relativo, porque de un campamento pasan a otro, pero los números no admiten comparación: en Arguineguín no hay tiendas para todos, los baños se comparten entre más de cien, es difícil moverse si empujar al vecino de cuadrícula y se duerme sobre el frío suelo, sin más comodidad que dos mantas, una para cubrirse como mejor se pueda y otra para acostarse sobre ella.

Quizás alguno esperaba que lo derivaran a un complejo turístico del sur de la isla, de esos que llevan meses vacíos por la crisis de la covid, como venía ocurriendo hasta esta misma mañana, pero los Ministerios de Interior y Migraciones ya han dejado claro que ese modelo es transitorio, que respondía a la urgencia de los números (18.000 llegadas este año, más de la mitad en los últimos 30 días).