España

Iglesias y Errejón sabrán el resultado 12 horas antes de hacerlo público y pactarán cómo escenificarlo

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, y su ‘número dos’, Íñigo Errejón, se reunirán para pactar la puesta en escena de lo que ellos mismos llaman «el nuevo Podemos». Los principales dirigentes de la formación morada tardarán prácticamente medio día en hacer públicos los resultados, ya que los anunciarán el domingo a las 14 horas.

La empresa que la formación morada contrata para realizar el recuento de las votaciones, Agora Voting S.L., podría tener el resultado aproximado el sábado de madrugada, ya que las votaciones se cierran a las 21 horas. «El recuento y el proceso en sí puede alargarse alrededor de 12 horas aproximadamente», señalan desde la empresa.

Lo que sí es seguro es que el domingo a primera hora, los principales dirigentes ya conocerán a los ganadores y es aquí donde pactarán la puesta en escena que realizarán sobre las 14 horas. La manera en que Podemos escenifique la derrota de unos y la victoria de otros es clave para conocer la deriva del partido. Si se cumplen los pronósticos y gana, ¿saldrá Iglesias solo o junto a los perdedores para mostrar ‘Fair Play’? ¿Se abrazarán de nuevo Iglesias y Errejón?

Son detalles de una puesta en escena que será muy cuidada y pactada por parte de sus dirigentes. El futuro de la formación está en juego y ellos eligen la imagen que van a dar de cara al resto de partidos y a la ciudadanía en general. La Asamblea Ciudadana decidirá el rumbo político y la nueva dirección de Podemos, y el problema puede llegar si el resultado no arroja una victoria «inequívoca» de alguna de las candidaturas que se presentan. La clave reside en la nueva composición del Consejo Ciudadano, el máximo órgano de dirección entre asambleas.

Ya se habla de ‘pucherazo’

En algunos foros de la formación morada ya se habla de ‘pucherazo’ en las votaciones que se anunciarán el domingo a las 14 horas en Vistalegre. El secretario de Organización, Pablo Echenique, y la corriente ‘pablista’ vuelven a ser el centro de todas las sospechas por parte del resto de corrientes, ‘errejonistas’ y anticapitalistas.

Esta semana, el secretario general de Podemos en Aragón confirmó que se puso en contacto en enero con la empresa contratada para realizar el recuento de la votaciones y solicitó unilateralmente un rediseño del sistema de votación para Vistalegre II. Casualmente, para adecuarlo a la propuesta de Iglesias. La empresa de votaciones telemáticas se negó por considerar que el desarrollo de una nueva herramienta digital «podía poner en peligro el sistema de votación», que no contaría con garantías suficientes. Ahora y desde la corriente ‘errejonista’ aseguran que estarán «vigilantes» y con mil ojos para evitar que se produzca cualquier irregularidad.

Un nuevo Podemos

Iglesias no ha parado de comentar que dejará la Secretaría General si no ganan sus ideas y su equipo y hasta ha redoblado el órdago al avisar que también se plantearía dejar el escaño. Esas advertencias han colocado a Errejón, que también se declara optimista, en un dilema de resolución casi imposible.

El secretario político, que no compite para liderar la formación morada porque quiere que Iglesias siga siendo el secretario general, tuvo que presentar una lista a la dirección al no lograr un acuerdo previo, ya que el sistema de votación aprobado, el del equipo «pablista», obligaba a asociar los documentos políticos a una candidatura. Errejón presenta así una lista propia al Consejo Ciudadano, en la que le acompañan los pesos pesados del llamado «errejonismo», como la portavoz en el Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre; el responsable de Internacional, Pablo Bustunduy; la de Igualdad, Clara Serra, y buena parte de sus colaboradores en la Secretaría Política.

Iglesias, por su parte, duplica su presencia en las votaciones. Opta a la Secretaría General con un sólo adversario: el parlamentario Juan Moreno Yagüe, próximo a Anticapitalistas, que aboga por mayores cotas de participación y democracia en Podemos. Pero lidera además la candidatura del equipo que presenta a la dirección, Podemos para Todas, en la que cuenta con sus colaboradores más cercanos, como Irene Montero, Rafael Mayoral, Gloria Elizo y en la que se ha integrado también el economista Vicenç Navarro.

De esta forma, Iglesias, en ese puesto de número uno, medirá sus fuerzas directamente con Errejón, cabeza de lista de Recuperar la Ilusión, quien ya ha dicho que asume los costes de defender sus ideas y que, al día siguiente, estará donde le coloque la militancia. La tercera lista en la que habrá que poner la mirada es en los Anticapitalistas y en su candidatura, Podemos en Movimiento. Tampoco presentan candidato a la Secretaría General y llevan en cabeza al eurodiputado Miguel Urbán, junto a nombres como el del alcalde de Cádiz, José María González, Kichi, la feminista Beatriz Gimeno o el actor Alberto San Juan.

Los «errejonistas» siempre rechazaron vincular los debates de ideas a las caras, justo lo que finalmente ha ocurrido por mucho que apelaran a salir de esa lógica de «plebiscito» y del «todo o nada», que a su juicio planteaba Iglesias. El pulso cada vez más enrarecido entre el número uno y el número dos del partido se ha ido incrementando sin que ninguno disimule ya las cuestiones que les separan en lo político e, incluso, en lo personal. Los dirigentes tienen medio día para pensar cómo quieren que sea la foto que escenifique la nueva deriva del partido.