Vinicius Junior ganó en Wembley su segunda Champions, la Decimoquinta del Real Madrid, hizo su segundo gol en una final de la Copa de Europa -dos de dos- y conquistó, de paso, más de tres cuartos del Balón de Oro que se entregará a finales de 2024. Tiene en su mano recibir esa pelota dorada que, a pesar de los mucho que lo maltratan sus organizadores, sigue siendo muy especial para todos los futbolistas.
La temporada de Vinicius ha sido de notable alto, aunque en este 2024 ha alcanzado la matrícula de honor. Todo empezó haciendo tres goles en la final de la Supercopa de España contra el Barcelona y, desde ese momento, ya no ha dejado de ser importante. Determinante. El mejor jugador del mundo sin discusión posible.
Vinicius ha sido importante en la Liga del Real Madrid. En el campeonato doméstico ha sumado 15 goles y seis asistencias en los 26 partidos en los que ha participado. Pero donde ha demostrado todo su potencial ha sido en la Champions y, sobre todo, en las eliminatorias y en la final. En el momento de la verdad. Cuando deben aparecer los buenos jugadores y Vini lo ha hecho.
Si en la fase de grupos hizo dos goles y dio tres asistencias, cuando llegó la hora de la verdad empezó a demostrar su importancia. Marcó un gol capital en la vuelta de octavos de final frente al Leipzig para evitar sustos mayores, dio dos asistencias en la ida contra el Manchester City e hizo dos dianas en su estreno en el Allianz Arena. En el Bernabéu no vio portería, pero su partido fue mucho más que todo eso. La guinda la puso en Wembley, haciendo el 0-2 definitivo en la gran final contra el Borussia Dortmund.
Vinicius disfruta cada vez que suena el himno de la Champions. Su competición. Donde se siente como pez en el agua. Donde brillan los buenos futbolistas. Si en 2022 hizo el gol en la final que dio a los blancos la Decimocuarta, en esta edición, dos años después, ha sido determinante. Un jugador tremendamente importante.
Vinicius es feliz cuando juega con la pelota de las estrellas y esta debería haber sido su llave para ganar su primer Balón de Oro. Tras llevar a los suyos a Wembley, después de ser capaz de levantar la Decimoquinta ante el Borussia Dortmund, no debería haber más discusión. El madridista ha aportado todos los argumentos en el césped para recibir todos los reconocimientos que en el club blanco siempre estuvieron seguros de que llegarían.
Y es que, en el Real Madrid siempre han estado convencidos de que Vinicius cumpliría todos los objetivos que le marcaron cuando llegó al club blanco. El brasileño llegó siendo un niño y poco a poco ha ido superando cotas. Ahora, se puede decir que es el mejor del planeta.
En definitiva, Vinicius es el máximo candidato para ganar la pelota dorada. Sí, el Balón de Oro. Ese trofeo que con sorna le decía en un Clásico Eric García que iba a ganar. Qué diferente está siendo la vida para ambos. O ese galardón que las aficiones rivales utilizaban para mofarse de él. «¡Balón de Oro, Vinicius, Balón de Oro!», se ha escuchado a lo largo de estos en multitud de estadios del fútbol español. Sí, siempre en España. Fuera de nuestras fronteras, el respeto al jugador brasileño es máximo.
Kroos, su gran rival
Vinicius es el máximo favorito para ganar el Balón de Oro, aunque Kroos es su mayor amenaza. Bendito rival. El propio Vini tiene claro que de ganar alguien el Balón de Oro debería ser el alemán. «Firmo ganar la final y la Copa América, y el Balón de Oro para Toni porque es su última temporada. Él entiende que estemos tristes por su decisión», aseguró el brasileño en el Media Day de la UEFA.
Y es que, después de ser capaz de guiar al Real Madrid hacia la Decimoquinta en su último baile como madridista, si lograr liderar a Alemania en una Eurocopa que se celebrará en su país y que será el último gran torneo antes de colgar esas botas blancas para siempre, es un firme candidato a ganar unos títulos que, posiblemente, a él le diga poco, pero que serían el broche perfecto a una carrera legendaria.
