El Real Madrid cayó en el Di Stéfano ante el Cádiz, en un partido que desde la primera jugada avisaba por dónde podía desarrollarse si los blancos no se implicaban como debían. Las rotaciones de Zidane eran necesarias y las hubo, aunque el técnico no estuvo acertado a la hora de dar minutos a determinados jugadores que, una vez más, volvieron a estar por debajo de las expectativas y de lo que exige la camiseta del conjunto madridista. Junto al entrenador, Isco, Lucas Vázquez y Marcelo quedan señalados por la imagen dada ante los amarillos.
En lo que respecta a Zidane, el técnico necesitaba dar entrada a los jugadores que se habían quedado en casa durante el parón FIFA y así hizo. Sin embargo sus cambios no fueron los que se esperaban. Asensio apuntaba al once en un tridente que ha funcionado durante estas primeras jornadas, pero el elegido fue Lucas. También volvió a algo que no le ha dado buen resultado este curso: la figura de un hombre de enganche por detrás de Benzema, esta vez en Isco. En el doble pivote, un exhausto Modric junto con Kroos recién salido de lesión.
La dupla del centro del campo no funcionó, lo que llevó al técnico a desdecirse y cambiarles. El alemán llegaba tras su lesión y haber disputado unos minutos con su selección, pero demostró que aún no está al cien por cien. En el caso de Modric, acusó su desempeño con Croacia, con quien ha jugado tres partidos durante el parón, y desde el inicio se le vio fundido.
Zidane se dio cuenta pronto de que había tirado la primera parte y trató de cambiarlo. Casemiro, Asensio y Valverde entraban al descanso para tratar de espabilar al Madrid, pero era tarde. El Cádiz se defendió con todo y consiguió guardar la renta de la primera mitad. El técnico vuelve a liarse en un partido ante un recién ascendido, como sucedió el pasado año y sus decisiones equivocadas -las ‘zidanadas’- empiezan a ser habituales.
Isco, Marcelo o Lucas no estuvieron a la altura
Las apuestas de Zidane para el partido tenían que demostrar que el técnico llevaba razón al darles la confianza para sacar adelante el partido y no estuvieron a la altura. Lucas Vázquez apenas apareció durante la primera parte. Aunque la mejor ocasión del conjunto blanco en la primera mitad estuvo en sus botas, con un disparo lejano que buscó la escuadra. Fue un simple fogonazo, no se le volvió a ver.
El que se presentaba ante su enésima oportunidad de reivindicación era Isco. El malagueño ha estado durante el parón en Valdebebas, poniéndose a tono con Zidane, pero por más que lo intenta, sigue sin acercarse al jugador que fue. El nivel al que rindió sobre el césped del Di Stéfano estuvo una vez más a años luz del que se espera.
Pero si lo que se vio de Isco y Lucas no gustó, tampoco lo hizo el papel de Marcelo, que ya no sorprende. El brasileño jugó de lateral, aunque se empeñó una vez más en querer ser extremo. El Cádiz armaba la contra y el futbolista del conjunto blanco no llegaba a la ayuda en defensa. De hecho, aprovecharon su banda para iniciar la mayoría de las jugadas en las que pusieron en peligro la portería de Courtois. Marcelo volvió a ser testigo directo de una nueva derrota del equipo, siendo el único jugador que ha estado sobre el terreno de juego en todas y cada una de las siete últimas derrotas que han cosechado los madridistas en Liga desde que regresó Zidane en la temporada 2018-19.