Los experimentos están prohibidos en Stamford Bridge. El vestuario del Real Madrid y Carlo Ancelotti tienen claro que el camino hacia las semifinales de la Champions pasa por apostar por lo seguro y, posiblemente, cambiar el dibujo en favor de un centrocampista más que aporte solidez a la medular madridista ante un rival muy físico que llevará a los blancos al máximo esfuerzo. Por lo tanto, decisiones extrañas como la que se vio en el Clásico, donde Modric jugó de falso nueve y durante unos minutos trataron de defender con tres centrales que dejaron vía libre al Barcelona hacia la portería de Courtois, no se verá en Londres.
Ancelotti tiene cosas buenas y cosas malas, pero sobre todo lo que tiene es mucha experiencia y sabe que a estas alturas de la temporada los experimentos se deben hacer con gaseosa. De hecho, la única gran duda que tiene el italiano en el once titular es si juega Fede Valverde de inicio aportando frescura en la medular y ayudando a Carvajal en tareas defensivas o sigue apostando por un tridente que va a menos en los últimos tiempos donde Asensio o Rodrygo formarían en la derecha. El charrúa parte con ventaja.
La exigencia será máxima en el partido que les medirá al vigente campeón de Europa. La intensidad del Chelsea llevará al límite en lo físico a los madridistas, como ya sucedió el pasado año en las semifinales, en las que los ingleses fueron muy superiores en ese apartado. Por ello, Ancelotti es consciente de que meter a Fede Valverde nivelaría la balanza en ese apartado. El uruguayo cuenta con despliegue físico. Si a eso se suma el gran estado de forma que ha demostrado en las últimas semanas, sobre todo con su selección, su presencia de inicio reforzando el centro del campo puede ser una solución al problema de juego, aportando un plus de energía.
Cuando se cumplen 11 meses y un día de la eliminación del Real Madrid ante el Chelsea, lo que quieren evitar por todos los medios los jugadores son pruebas extrañas como la de aquella noche, cuando Zidane apostó por Vinicius de lateral derecho para poner de inicio a un Hazard que no estaba apto para jugar. Por lo tanto, Ancelotti tiene 10 piezas fijas y una duda: en Valverde, Asensio o Rodrygo está la respuesta.
Un gran momento físico
Si tácticamente el Real Madrid no atraviesa su mejor momento y la plantilla es plenamente consciente de ello, físicamente el equipo está mucho mejor que en aquella eliminatoria. El regreso de Antonio Pintus ha dado un impulso al conjunto blanco, que se siente preparado para poder medirse a uno de los equipos más intensos del continente.