La victoria sufrida del Real Madrid ante el Celta de Vigo en el partido previo a los cuartos de final de la Champions League abre el debate sobre qué sistema es el más apropiado para medirse al Chelsea. El conjunto madridista no cuajó un buen partido en Balaídos, pese a que acabó llevándose los tres puntos, y con más sombras que luces viajará a Stamford Bridge buscando un buen resultado que le permita seguir peleando por la máxima competición continental. Sin embargo, después de lo visto en los últimos partidos, la efectividad del 4-3-3 habitual de Carlo Ancelotti deja muchas dudas de cara al primer asalto de la eliminatoria.
La exigencia será máxima en el partido que les medirá al vigente campeón de Europa. La intensidad del Chelsea llevará al límite en lo físico a los madridistas, como ya sucedió el pasado año en las semifinales, en las que los blues fueron muy superiores en ese apartado. Por ello, Ancelotti deberá plantearse si decide jugar con su once tipo o si, por el contrario, opta por introducir un jugador de mayor recorrido como puede ser Fede Valverde.
El uruguayo cuenta con un despliegue físico que permitiría equilibrar la balanza ante un equipo en el que la intensidad no es negociable. Si a eso se suma el gran estado de forma que ha demostrado en las últimas semanas, sobre todo con su selección, su presencia de inicio reforzando el centro del campo puede ser una solución al problema de juego, aportando un plus de energía.
El cambio de sistema sería obligado para introducir a Valverde, puesto que para Ancelotti hay algo que es inamovible: el tridente del centro del campo. La titularidad de Modric, Kroos y Casemiro no es negociable. No lo fue con Zidane y tampoco lo es con el italiano, que sabe que cuenta con el mejor trío de centrocampistas del mundo y que, como tal, son capaces de desequilibrar el partido en cualquier momento.
Por ello, la única solución pasaría por prescindir del extremo derecho. Ha sido la única posición del equipo que no ha tenido un dueño fijo en toda la temporada, con Asensio y Rodrygo alternándose en el once. Pese a que han sido los dos jugadores que han rendido un punto por encima que el resto, no han conseguido asentarse.
La entrada de Valverde en el equipo en Stamford Bridge permitiría además dotarle de un mayor blindaje defensivo. Una de las zonas donde más están sufriendo los blancos esta temporada es en los carriles. Mendy y Carvajal necesitan más ayudas y a los tres integrantes del centro del campo les falta capacidad para llegar a ellas. Por ello, la presencia del charrúa tendría como resultado un Madrid más sólido y compacto.
Necesario para desahogar el centro del campo
El último factor que hace que la presencia de Valverde pueda ser determinante en la eliminatoria es el juego del propio Chelsea. El equipo de Tuchel destaca por su intensidad y capacidad de despliegue, lo que le hace un equipo tremendamente sólido al que es muy complicado doblegar, pese a que su punto fuerte no está en el dominio del balón.
El conjunto inglés renunciará a la pelota, pero buscará asfixiar al conjunto madridista con una presión constante, como sucedió el pasado curso. Por ello, para generar superioridades frente a ese 3-5-2 que plantarán sobre el césped, se hace imprescindible que los madridistas cuenten con un plus en el centro del campo.