En el Real Madrid ha sentado muy mal la designación de Alejandro Hernández Hernández como árbitro elegido para dirigir el derbi madrileño que medirá al Atlético de Madrid con los blancos el próximo domingo en el Metropolitano. La cúpula madridista está convencida de que las quejas de Gil Marín han surtido efecto y han puesto “el peor árbitro” posible para los de Zidane.
Hay que recordar que el consejero delegado del Atlético de Madrid se pronunció al respecto de las declaraciones del presidente del Comité Técnico de Árbitros, Velasco Carballo, en las que aseguraba que la acción de Thomas Lemar frente al Villarreal debía haber sido tarjeta roja. Gil Marín afirmó que dichos comentarios “condicionan las decisiones de los colegiados”.
«No entiendo por qué el presidente del Comité Técnico de Árbitros reprende públicamente a uno de los mejores colegiados que tenemos en España (Ricardo de Burgos Bengoetxea), y más en una decisión que nunca se puede considerar como un error. El árbitro aprecia una jugada en el campo y toma una decisión tras verla por televisión, como la gran mayoría de aficionados al fútbol», aseguró.
Tras estas palabras, el Comité Técnico de Árbitro anunció los árbitros designados para los 10 partidos de Primera y 11 de Segunda, eligiendo al canario para el derbi madrileño, un encuentro trascendental en la lucha por la Liga. El Atlético de Madrid es líder y aventaja en cinco puntos a un Real Madrid que necesita ganar si quiere seguir aspirando al título.
Junto a Hernández Hernández y sus asistentes, José Luis González González también hará acto de presencia en el derbi como encargado de dirigir el VAR, instrumento sobre el que cada día circula más polémica y que en partidos entre grandes rivales, como es el caso del duelo entre Real Madrid y Atlético de Madrid, adquiere mayor importancia y opciones de utilización.
Su historial contra el Madrid
El de Lanzarote ha dirigido al Real Madrid en 24 ocasiones con un balance de 14 victorias para los blancos, cuatro empates y seis derrotas. Además, ha expulsado a cuatro madridistas y ha pitado cinco penaltis en su contra. Por otro lado, sus números con el Atlético de Madrid son mucho mejores. Los ha pitado en 16 partidos y sólo en uno cayeron derrotados, mientras que cinco se saldaron con empate. Además, sólo ha expulsado a un futbolista rojiblanco y, como a los madridistas, ha pitado cinco penas máximas en su contra.
Sus decisiones han sido especialmente polémicas en los Clásicos que ha dirigido y, curiosamente, el Real Madrid ha sido habitualmente el perjudicado. Por Valdebebas todavía se recuerda el gol anulado a Bale en 2016, donde también expulsó a Sergio Ramos. Al capitán madridista, con el que mantiene una relación complicada, también le mandó al vestuario antes de tiempo en el duelo entre madridistas y azulgranas en 2017. Aquella tarde no señaló un claro penalti de Umtiti sobre Cristiano Ronaldo.
En 2018, en la jugada del segundo gol barcelonista, obra de Messi, hubo una falta de Suárez sobre Varane que el trencilla obvió, pese a ser advertido por el VAR. También se comió una clara doble zancadilla de Jordi Alba sobre Marcelo en el área con 2-2. Y por último, el curso pasado los blancos reclamaron dos penaltis sobre Raphael Varane en el Camp Nou. Ni el colegiado canario ni De Burgos Bengoetxea, encargado del VAR en aquel partido, quisieron verlos ni concederlos. Ahora, en su primer derbi, la entidad presidida por Florentino Pérez espera que no sea protagonista.