El Real Madrid, al igual que muchos otros clubes estos días, ha tomado medidas internas para combatir la grave crisis económica que está generando el coronavirus. Los blancos no son esquivos a los contratiempos que generan el cese de la actividad deportiva en España. Las conversaciones fueron rápidas entre la plantilla, predispuesta, y la dirección del club. De estas obtuvieron que lo más lógico era una reducción de los salarios de la plantilla.
Dependiendo el rumbo que tome la Liga sería de un 10 o un 20%. En el mejor de los casos, si la evolución de la pandemia se controla y la competición se reanuda, la baja salarial se fijará en el 10%. Sin embargo, de no concluirla el recorte ascenderá hasta el 20% ya que las pérdidas del club serán mayores. Sergio Ramos, como capitán y hombre fuerte del vestuario, lideró al grupo hacia esa propuesta de reducción para así no perjudicar al resto de trabajadores de la entidad.
Mientras que por el lado culé la rebaja salarial ha generado un polvorín del que todavía se extraen consecuencias, con una reducción del 70% de los salarios y la plantilla enfrentada con la maltrecha directiva; por el lado blanco las gestiones fueron rápidas y positivas, con todas las partes conformes y entendiendo el esfuerzo que debía afrontar cada jugador en su posición. Aun así, el esfuerzo de los jugadores es notorio y el club se ahorrará en torno a 50 millones de euros.
Las reducciones, al detalle
Sergio Ramos es el jugador que ha encabezado la propuesta y el que se ha encargado de tratar con sus compañeros para hacerles ver la importancia de esta reducción. De hecho, el capitán blanco es uno de los jugadores que más dinero perderá con esta medida, principalmente porque es uno de los jugadores mejor pagados. El sevillano percibe unos 12 millones por temporada y con esta medida, dejaría de ganar 1,2 kilos en el mejor de los casos o 2,4 de no reanudarse el campeonato liguero, aún en el aire.
Otros dos de los mejores pagados de la plantilla es Karim Benzema. El francés también alcanza anualmente las ocho cifras con unos 11 millones de euros netos. En este caso, el jugador perdería unos 1,1 millones de euros en el caso de lograr acabar el campeonato liguero y se elevaría a los 2,2 kilos de no hacerlo.
En otro escalón de salarios están jugadores como Modric o Marcelo. Tanto el balcánico como el brasileño están próximos a los 10 millones de euros netos por temporada, por lo que su reducción es clara y estará en torno a uno o dos millones, según el desenlace que tome la Liga.
En otro escalafón de emolumentos están Isco Alarcón o Vinicius, que perciben unos siete kilos netos cada campaña actualmente. Estos perderán unos 700.000 euros de ser el 10% y 1,4 de ser el 20%. En otro escalón, pese a no ser de los que menos perciben de la plantilla, están hombres como Rodrygo, Nacho o Asensio que percibe unos cuatro millones. Las pérdidas de estos no alcanzarán en ningún caso el millón: 400.000 euros en el mejor de los casos y 800.000 en el peor de ellos.
Los cálculos son sencillos y el total de estos alcanzan los 50 millones de euros para la Casa Blanca con la reducción llevada a cabo tanto en las secciones de fútbol como de baloncesto merengues. Un esfuerzo importante por parte de los jugadores y un gesto aún mayor hacia los trabajadores de la entidad. De hecho, el Comité de Empresa del club respaldó «enfáticamente esta decisión» catalogándola de «responsable y modélica».