El PSG debería estar obligado a vender jugadores si jugase con las mismas reglas que el resto de clubes de fútbol del mundo. Los capitalinos, tras fichar este mismo verano a Messi, Ramos, Achraf, Donnarumma y Wijnaldum, apenas han recaudado nueve millones de euros en ventas de jugadores siendo un verano muy plácido para ellos porque no han tenido problemas para inscribir jugadores.
El Olympique de Marsella, sin embargo, no puede apuntar a su último fichaje, Amine Harit, debido a que la Ligue 1 le exige que venda jugadores para cuadrar cuentas en una situación que ha despertado la indignación en Francia. ¿Juega el PSG con unas normas distintas al resto con la cooperación de la UEFA?
El hecho es que desde que el PSG se alineó contra la Superliga, los premios no han parado de lloverle desde la UEFA. Empezando por el nombramiento de Nasser Al-Khelaifi como presidente de la Asociación Europea de Clubes (ECA) teniendo un sillón permanente en el Comité Ejecutivo de la organización liderada por Aleksander Ceferin.
La UEFA, lejos de investigar al PSG por sus cuentas, ha permitido que el club fiche a voluntad durante este verano gastando en el mercado 75 millones de euros de forma pública en traspaso, más una cantidad cercana a los 100 en primas de fichajes y todo ello sin contar las lustrosas fichas de Messi, Ramos, Donnarumma y Wijnaldum, quienes han llegado gratis.
Mientras el Marsella tiene que hacer malabares para cuadrar sus cuentas, el PSG vive en un estado de máxima tranquilidad jugando por encima de la Ley. El fútbol europeo debe tomar medidas o muy pronto se romperá cualquier tipo de equilibrio.