Manuel Ángel volvió a capitanear al Real Madrid Castilla este fin de semana contra el Yeclano, pero como ya se sabe, a perro flaco todo son pulgas. Y en este caso, el talentoso jugador y esperanza del filial madridista para empezar a remontar el vuelo ha sufrido una lesión en los isquiotibiales que le tendrá entre un mes y mes y medio apartado de los terrenos de juego.
El mediocampista de 20 años volvió a jugar el pasado sábado bajo las órdenes de Raúl González. Una fractura en una vértebra dorsal le dejó en tierra este verano cuando estaba inicialmente previsto que viajara con el primer equipo a Estados Unidos. Aquella lesión también hizo que se perdiese el inicio de temporada con el filial. Internacional con las categorías inferiores desde la Sub-15, el madridista quería volver a su mejor nivel, pero se ha encontrado con una nueva piedra en el camino.
Contra el Yeclano Deportivo, Mami -así es el apodo con el que se conoce a Manuel Ángel- entró en el 53′ de partido y revolucionó el encuentro nada más saltar al campo. En su primer balón, el 8 provocó una peligrosa falta en el balcón del área. De repente, el centro del campo blanco tuvo impacto, algo que raramente se vio en este inicio de temporada. El andaluz trajo versatilidad, rapidez, roturas entre las líneas rivales… Es lo que el Castilla necesitaba y su entrenador lo sabe. «Es un jugador especial. Cualquiera que haya visto el partido sabe que es un jugador diferente», decía el emblemático 7 en la rueda de prensa posterior al encuentro.
Fastidio. Esta sería la palabra para definir los últimos meses de Manuel Ángel en Valdebebas. La lesión del joven futbolista llegó en un momento inoportuno. Mami tenía que irse a Estados Unidos para realizar la pretemporada con el primer equipo, pero finalmente se quedó en Madrid. Con el difícil inicio de curso del filial, los chicos del Castilla le echaron mucho de menos. Él a ellos también.
«Su recuperación ha sido lenta y fastidiosa. Parecía que estaba preparado, pero luego, no era así. Manuel quería ayudar al equipo, pero no podía», relata su entorno a OKDIARIO. Sin embargo, Raúl pide tranquilidad acerca de su pupilo. «Intentaremos cuidarle, ver cómo afronta estos minutos que ha jugado. Ha estado mucho tiempo sin jugar y hay que ir con calma. Lo importante es tenerle cada jornada», decía el técnico madrileño.
Desde su llegada a la capital en 2014, procedente del Sevilla, Manuel Ángel ha ido escalando etapas con la elástica blanca. Pegó el boom cuando llegó al Juvenil A en 2021, con 17 años. En dos años, bajo las órdenes de Álvaro Arbeloa, el nativo de Albaida del Aljarafe se ha inscrito como uno de sus elementos claves. En la 2022-23, fue el capitán del Triplete (Liga, Copa del Rey Juvenil y Copa de Campeones Juvenil). Es un líder nato y lo hace sentir en el campo. El andaluz sabe jugar de pivote, de medio tradicional y de 10. En otras palabras, es un Modric 2.0.
La temporada pasada, tras haber tanteado algún banquillo e incluso 19 minutos en Primera Federación en los anteriores cursos, Mami fue inscrito definitivamente con el filial. Y, cómo no, volvió a ser un futbolista crucial. En 32 partidos disputados, fue titular en 30. En 2.347 minutos jugados, acumuló dos goles y dos asistencias. Esta temporada, Manuel es el capitán de este Castilla. Cuando no estaba, Gonzalo y Asencio asumieron la responsabilidad. Cuando salió al campo este sábado, el brazalete volvió a ser suyo y, si las lesiones le respetan, lo será hasta el final del ejercicio.
