El Juvenil A de Álvaro Arbeloa cumplió con su cometido, ganó al Unión Berlín y se metió en octavos de final de la UEFA Youth League, salvo que el Sporting de Braga gane por ocho goles al Nápoles en su partido. Si los lusos hacen la machada, los blancos serán segundos y se verán obligados a jugar una peligrosa ronda de dieciseisavos de final contra un equipo que llegue de la Ruta de Campeones.
A los 4 minutos de partido, Iker Bravo empezó a allanar el partido de los de Arbeloa con un gol de rematador. Yusi subió el balón por la banda, levantó la cabeza, vio al catalán y éste, tras controlar a la perfección, realizó un golpeo ajustado al palo imposible para el meta rival.
Los de Arbeloa se fueron al descanso con una ventaja mínima y con la sensación de que iban a tener que seguir apretando para lograr los tres puntos, ya que el Unión Berlín no se lo iba a poner fácil. El Real Madrid creó más ocasiones, pero no pudo aumentar la renta y, en los minutos finales, los alemanes comenzaron a generar peligro.
En la segunda mitad, el Juvenil A del Real Madrid mantuvo la seriedad e Iker Bravo, con otro golazo, terminó de cerrar un partido donde los blancos demostraron que sigue subiendo el nivel esta temporada. El delantero catalán hizo uno de sus mejores partidos desde que milita en las categorías inferiores de los blancos.
Este partido pasará a la historia por el impresionante ambiente que se vivió en el Stadion An der Alten Försterei, donde el primer equipo del Unión Berlín juega su partido de Bundesliga. Casi 20.000 espectadores se dieron cita en el recinto, logrando un nuevo récord de asistencia en un partido de la fase de grupos de la UEFA Youth League.
