Un alumno de un instituto de Mallorca denuncia que le prohibieron ir a su graduación por criticar al centro
Tadeo Marcaccini, estudiante de segundo de bachillerato del IES Baltasar Porcel de Andratx, iba a pronunciar un discurso crítico contra la dirección y el profesorado
Tadeo Marcaccini, un alumno de 17 años que ha cursado este año segundo de bachillerato en el instituto Baltasar Porcel de Andratx, en Mallorca, ha denunciado en las redes sociales que la directora de este centro público le prohibió a él y a su familia asistir a la graduación final que se celebró la tarde de este jueves.
Este joven estudiante asegura, además, que la dirección «amenazó tanto a los alumnos de segundo de bachillerato como a los de cuarto de la ESO», diciéndoles que si él o alguno de sus familiares iban a la graduación no se podría celebrar. Todo ello porque Tadeo iba a pronunciar un discurso muy crítico contra la dirección y el profesorado del IES Baltasar Porcel.
«Todo esto viene por mi intención de hacer un discurso en representación mía, de mis compañeros y alumnos de otros años del centro, que queríamos manifestar el descontento que teníamos por unos hechos que habían sucedido en el centro durante estos seis años en los que hemos estudiado allí, algunas de estas injusticias que habíamos vivido por causa de algunos supuestos educadores», manifiesta Tadeo en el vídeo, que está colgado en Instagram y en Tik Tok y que está siendo seguido y comentado de forma masiva en estas redes sociales.
Este estudiante quiere hacer hincapié en la situación actual del centro y lamenta que «muchos jóvenes hoy en día prefieren levantarse una o dos horas antes y coger dos autobuses con tal de no estudiar en el Baltasar Porcel por la mala fama que se ha ganado».
Tadeo pone el ejemplo de un docente que dijo que los alumnos de hoy en día no están preparados para nada y que no se dejaría operar por alguien como Tadeo, sin haberlo tenido nunca en clase. «Me quejé a mi tutora y a la dirección y nunca recibí una disculpa. Hay otras vías para manifestar el descontento pero es cierto que si esas vías no llegan a nada, uno se ve obligado a utilizar otros canales como las redes sociales», señala.