Delirio, el restaurante que rinde homenaje a Goya con sabores de Aragón
El restaurante Delio es una apuesta de cuatro jovenes socios por el arte gastronómico
Disfruta de un risotto y remátalo con unos churros artesanales
Si estás en Zaragoza y eres amante de Francisco de Goya, el restaurante Delirio es tu sitio. Se trata de un establecimiento ubicado en la calle Baltasar Gracián, n.º 2, una de las zonas más juveniles de la ciudad, al estar muy próximo a la Universidad.
OKDIARIO ha visitado este atrevido establecimiento dedicado al pintor aragonés más universal. Sin lugar a dudas, el restaurante se posiciona como el único lugar gastronómico de España que recrea, en varias estancias, las épocas más señaladas de su biografía. Algo de tener considerar si se tiene en cuenta que en Aragón, esta semana, se han empezado con los preparativos para el bicentenario del artista, para el próximo 2028.
Delirio abrió sus puertas el pasado mes de octubre, y se ha convertido, en poco tiempo, en una atracción cultural de la capital aragonesa. Se trata de un negocio emprendedor, que reúne el trabajo y el ingenio de cuatro jóvenes socios, amigos entre sí, Alejandro Aldana, Aldo Sorrosal, Luis Antonio Martín Nuez y Jorge Mata, que decidieron apostar, de la mano del grupo Laminero, por ofrecer al cliente un ambiente refinado impregnado de raíces y cultura aragonesa.
Goya en el restaurante
El objetivo de sus propietarios fue lograr por una experiencia inmersiva, que despertara en sus clientes la sensación de viajar a otra época, a través de los diferentes ambientes que han creado, inspirados en los periplos vitales de Goya.
«El comensal podrá decantarse por reservar en una de las dos plantas del restaurante, cada una con distinto ambiente. La planta calle, está dedicada a la vida burguesa y noble. Sus pares de varios metros de altura, han sido decoradas con las obras más famosas del pintor, como La maja desnuda o Saturno devorando a sus hijos», nos explica Alejandro Aldama, uno de los socios.
La planta segunda abalconada ofrece un ambiente íntimo y romántico, con un estilo más afrancesado y decorado con imponentes lámparas de luz y muchas velas. «Está inspirada en el exilio de Goya en Burdeos, donde pasará sus últimos años de vida», nos cuenta.
Hay que advertir que buena parte de la decoración es original de la época, como las puertas que conforman un collage en la estancia del restaurante que recrea Fuendetodos (Zaragoza), el pueblo natal de Goya. Así mismo han sido los propios socios los que han diseñado y confeccionado la mayor parte de los detalles que el restaurante atesora.
Qué comer en el restaurante Delirio
En sus fogones, que corren a cargo del cocinero Manuel Gándara, se apuesta por los productos de la tierra. Gándara se ha basado en las recetas tradicionales, para trasgredirlas y darles un toque singular y moderno, adaptado a los gustos contemporáneos, como el tartar de trucha, el rabo de toro o los churros de masa casera.
«Nuestro lema es ‘arte sin reglas’», nos recuerda Gándara, quien reconoce que la cocina italiana ha dejado una impronta muy fuerte en la variedad culinaria que Delirio ofrece, como en las pizzetas de autor, en horno de piedra.
Para los amantes del queso, recomiendan el risotto de boletus y ajo negro, mantecado en una auténtica rueda de queso pecorino, acabado con un crujiente pareas y aroma de trufa de Teruel. Un inciso, el arroz es del conocido cultivo aragonés de Brazal.