Andalucía

Detenida una madre de Granada por sustraer a su hija de 10 años de un centro de protección de menores

Una madre de Jete (Granada) ha sido detenida como presunta autora de un delito de sustracción de menores después de aprovechar presuntamente que su hija de diez años disfrutaba de un permiso de salida del centro de protección de menores en el que se encontraba interna para quedársela.

Además, y según ha informado la Junta en una nota tras la operación de la Jefatura Provincial de Granada de la Unidad de Policía Adscrita a la Comunidad Autónoma de Andalucía, la mujer se habría negado en reiteradas ocasiones a reintegrar a su hija en el citado centro de menores.

El operativo fue activado cuando el centro interpuso una denuncia, lo que motivó que la Fiscalía de Menores de la Audiencia Provincial de Granada ordenara al Área de Protección al Menor de la Unidad de Policía Adscrita la localización y reintegro de la menor al centro «con la máxima urgencia».

En consecuencia, se estableció un dispositivo policial de búsqueda en la localidad de Jete, donde se tenía conocimiento del último domicilio de la madre, que al parecer se movía de un lado a otro en una caravana. Tras varias horas de búsqueda finalmente se encontró a ambas y se procedió a la detención de la mujer y al reintegro de la menor en el centro de protección del que había sido sustraída.

El TS debate sobre el indulto a Juana Rivas

En otro orden de cosas, los magistrados del Tribunal Supremo debatirán este martes 5 de octubre su informe elaborado tras recibir el expediente del Ministerio de Justicia sobre la petición de indulto que realizó Juana Rivas, la madre de Maracena (Granada) condenada a dos años y seis meses de prisión por un delito de sustracción de menores.

El debate llega a los pocos días de que trascendiera que la Fiscalía del Supremo había concluido su propio informe, en el que se muestra a favor de que se conceda el indulto parcial Rivas, de manera que se dé una reducción de seis meses de la pena de prisión, que sugiere dejar en dos años. Fuentes de la Fiscalía confirmaron a Europa Press que también han estimado rebajar la pena de inhabilitación especial para ejercer la patria potestad de seis años a cuatro.

Fue a finales del pasado abril cuando la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo estimó parcialmente el recurso de casación planteado por Rivas contra la condena a cinco años de prisión impuesta por el Juzgado de lo Penal 1 de Granada y la rebajó a dos años y seis meses de cárcel al considerar que, aunque fueron dos los menores sustraídos -sus dos hijos-, cometió un único delito y no dos.

Por eso, el tribunal sentenciador encargado de emitir el informe relativo al indulto solicitado por Juana Rivas será el Supremo. Una vez que tenga el texto, lo sumará al de Fiscalía y enviará todo al Ministerio.

Juana Rivas, que ingresó voluntariamente el pasado 11 de junio en el CIS ‘Matilde Cantos’ de Granada para cumplir la orden de ingreso en prisión, abandonó el centro a los pocos días, en tanto que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha clasificado a la interna en tercer grado, aplicándole el artículo 86.4 del Reglamento Penitenciario, lo que supone cumplir la pena en casa con pulsera telemática.

Rivas, que también fue condenada a inhabilitación especial para ejercer la patria potestad respecto de sus hijos durante seis años, solicitó al Gobierno el indulto total alegando que delinquió por un motivo «comprensible desde el punto de vista humano» como es «proteger a sus hijos» y recalca que «como víctima de violencia de género recibe la atención adecuada de los servicios municipales de Maracena», mientras que en Italia se «continúa investigando las denuncias interpuestas por violencia familiar».

El Supremo la condenó a dos años y seis meses de prisión por un delito de sustracción de menores, después de que en 2016 se fuera con sus hijos de Italia con la pretensión de no regresar pese a no contar con el consentimiento paterno, llegando a pasar en verano de 2017 un mes en paradero desconocido con los pequeños incumpliendo las resoluciones judiciales que le obligaban a entregárselos al padre.

Ella ha defendido durante este tiempo que se fue con sus dos hijos de Italia -donde tenían fijada su residencia habitual- para huir de unos supuestos malos tratos de los que acusa a su expareja y padre de los menores.