El drama de María Jiménez que explica su radical cambio de imagen
María Jiménez ha reaparecido este sábado en ‘Viva La Vida’ tras dos años de silencio y algunos infortunios vitales. Ya recuperada del cáncer de mama que le fue detectado hace cinco años, ahora la cantante se centra en superar las batallas con fortaleza. Su regreso televisivo ha estado marcado por el impactante cambio físico que la intérprete de ‘Se acabó’ ha sufrido durante su ausencia y es que la sevillana haciendo gala, una vez más, del humor que siempre le ha caracterizado, ha revelado cómo se encuentra con su nuevo aspecto: «Estoy muy gorda, estoy muy gorda, gordísima. Peso 83 kilos, me he puesto 30 encima».
María ha confesado qué motivos se esconden tras su transformación y no son otros que los repetidos problemas de salud contra los que ha tenido que combatir. «Me operaron de un cáncer de mama, luego de la garganta, luego me rompí el peroné, dejé de fumar y me entró mucha hambre. He pasado un tiempo pachuchilla, pero ya estoy mejor», ha desvelado la andaluza. No obstante, la cantante jamás se ha rendido: «No soy una mujer muy depresiva. He ido saliendo de todo».
María Jiménez durante su entrevista con Toñi Moreno /Gtres
Pese a su fortaleza, no ha podido evitar emocionarse al recordar cómo le contó a su hijo Alejandro la enfermedad que estaba sufriendo. «A mi hijo se lo dije a bocajarro porque si no me derrumbo yo sola. Me enteré de que tenía cáncer y a los tres días, también le tuve que dar la noticia de que su padre, Pepe Sancho había muerto», ha dicho.
Un enternecimiento que ha desaparecido de su rostro al mencionar al que fuera su esposo hasta en tres ocasiones, Pepe Sancho. La cantante ha desvelado que no le perdona y, de nuevo, ha vuelto a repetir un refrán que ya pronunció hace tres años al rememorar la relación sentimental tormentosa que ambos habían protagonizado: «Muerto el perro se acabó la rabia».