El menú navideño de los Reyes Felipe y Letizia en Zarzuela: entre la tradición y los reencuentros

La magia de la Navidad también llega al Palacio de la Zarzuela, donde cada detalle se convierte en un reflejo de la armonía entre tradición y modernidad. En estas fechas, la Reina Letizia asume un papel especial como anfitriona de una velada íntima en la que la Familia Real se reúne para celebrar, dejando de lado el protocolo que marca su día a día. Pero este año, la cena de Nochebuena adquiere un matiz especial: un reencuentro familiar marcado por la ausencia diaria de las infantas Leonor y Sofía, quienes, por motivos académicos, han pasado gran parte del año lejos del hogar.

Una Navidad de reencuentros

Esta será una Nochebuena diferente para los Reyes y sus hijas. Leonor, la Princesa de Asturias, regresará a casa desde la Escuela Naval de Marín, mientras que la infanta Sofía viajará desde Gales, donde estudia. La ocasión marcará un reencuentro familiar tras meses de distancia debido a sus obligaciones académicas. También es tradición que Paloma Rocasolano, madre de la Reina Letizia, se una a esta cena especial, mientras que la Doña Sofía suele pasar la noche con su hermana Irene.

Aunque se trate de una celebración íntima, no faltará el espíritu navideño. Según se ha sabido en otras ocasiones, el ambiente en Zarzuela es relajado y familiar, con momentos de hermandad que contrastan con el rigor del protocolo que caracteriza al resto del año.

Equilibrio entre tradición y sofisticación

La Reina Letizia, apasionada de la alimentación saludable, no escatima esfuerzos para diseñar un menú que combine tradición y sofisticación. Este año, la cena incluirá los clásicos entrantes como salmón ahumado, jamón ibérico de bellota, foie y el siempre presente pudín de marisco. Las angulas, un lujo habitual en estas fechas, también tendrán su lugar en la mesa, acompañadas de salsas y panes artesanales que realzan sus sabores.

El plato principal será un pavo relleno de verduras, preparado con una receta que mezcla técnicas tradicionales con un toque moderno, acompañado de puré de castañas y verduras asadas con hierbas aromáticas. Este plato, que simboliza la Navidad en muchos hogares, será el eje central de la cena.

Para el postre, Letizia no olvida los gustos de su madre, quien tiene predilección por el helado de café. Junto a él, los dulces navideños como turrones, mazapanes y polvorones completarán la velada, asegurando que nadie se quede con hambre.

Una velada privada y especial

Los preparativos para esta noche comienzan días antes, pero a partir de las 19:00 horas, el personal de servicio se retira para disfrutar de la celebración con sus familias. Así, son los propios Reyes quienes se encargan de servir la cena, creando un ambiente íntimo y alejado de las obligaciones reales.

Además del exquisito menú, la noche es una oportunidad para desconectar y compartir momentos en familia. Tal como reflejan los años previos, la cena de Nochebuena en Zarzuela es un espacio donde el amor y la unión familiar priman sobre el protocolo.

La evolución de una tradición

Con la llegada de Letizia a la Familia Real, la celebración de la Navidad en Zarzuela ha experimentado cambios significativos. Atrás quedaron las cenas opulentas y multitudinarias de épocas pasadas. Ahora, la Reina apuesta por reuniones más sencillas, pero no por ello menos significativas. La incorporación de platos más saludables y ligeros refleja su compromiso con una alimentación equilibrada, sin renunciar a los caprichos típicos de la temporada.

Un momento de unión y reflexión

La Navidad en Zarzuela es mucho más que una cena. Es un instante para reflexionar sobre el año que termina, celebrar los logros alcanzados y mirar al futuro con esperanza. Para los Reyes, esta fecha es una oportunidad de disfrutar de su familia, lejos de los focos mediáticos.

Así, mientras millones de españoles escuchan el mensaje navideño del Rey, en el Palacio de la Zarzuela, la Familia Real comparte una noche inolvidable, recordándonos que, al final, la esencia de estas fechas está en la unión y el amor que se comparte con los seres queridos.