El golpe de efecto de la Infanta Sofía en su esperada reaparición

La Infanta Sofía se ha convertido en la gran protagonista de las celebraciones del Día de la Hispanidad. Después de varias semanas sin aparecer en público, la hija menor de los Reyes ha acompañado a Sus Majestades en este especial acto de la agenda de la Familia Real. Es la segunda vez que la Infanta Sofía participa en este importante acto en la agenda de la Casa de S.M. el Rey sin la compañía de la Princesa de Asturias que se encuentra estudiando en el Atlantic College de Galles. La heredera regresará a casa de cara a finales de mes, coincidiendo con las vacaciones escolares. Será entonces cuando tenga lugar además la entrega de los Premios de la Fundación Princesa de Asturias que este año han cambiado su tradicional fecha de entrega, precisamente por el calendario lectivo de Leonor.

Poco antes de las once de la mañana la comitiva con los Reyes y la Infanta Sofía llegaba a través del madrileño Paseo de la Castellana hasta la Plaza de Lima, que se ha convertido una vez más en el centro neurálgico de las celebraciones. Sus Majestades han llegado en un Rolls Royce de Patrimonio Nacional, mientras que su hija menor lo hacía en otro vehículo, justo detrás.

Como era de esperar, gran parte de las miradas estaban puestas en la reaparición de la hija menor de los Reyes, dado que, aunque se la pudo ver brevemente en su primer día de colegio el pasado mes de septiembre -al que acudió acompañada por don Felipe además-, no había participado en ninguna salida pública desde el verano, cuando la Familia Real puso fin a sus vacaciones ‘oficiales’ en la isla de Mallorca.

Es la primera vez en los últimos años que se ve a la Infanta en este acto sin mascarilla, dado que ya se han eliminado todas las restricciones. Esto ha permitido comprobar que la pequeña de la familia sigue los pasos de su hermana. En esta ocasión, Sofía se ha maquillado levemente, algo que se apreciaba de manera especial en sus labios con un brillo de color rosa. En cuanto al cabello, la Infanta sigue fiel a su peinado preferido, el cabello suelto con ligeras ondas.

Para esta cita, la Infanta Sofía ha estrenado un favorecedor vestido de lunares en color azul, un estampado a juego con el estilismo de la Reina Letizia. Un diseño corto de Carolina Herrera -una de las firmas fetiche de su madre-, ceñido a la cintura con una lazada y ligeramente fruncido en la zona del escote, que ha adaptado a su gusto, algo que suele hacer de manera habitual. La hermana de la Princesa de Asturias lo ha combinado con unas bailarinas a tono. Un look que puede interpretarse como un guiño a la heredera, dado que su color fetiche y simbólico del Principado es precisamente el azul.

Al igual que el pasado año y, en ausencia de la Princesa Leonor, la Infanta Sofía se ha colocado a la derecha de su padre, cuando lo habitual es que se ubique junto a su madre. A lo largo de la jornada la hemos podido ver compartiendo confidencias con él y charlando de manera animada. Este año tampoco estará presente en la tradicional recepción a las autoridades, aunque se espera que en próximas ediciones ya comiencen a participar en este tipo de actos las hijas de los Reyes, al menos, la Princesa Leonor.