Christian de Dinamarca celebra su mayoría de edad con un cónclave royal con destacadas ausencias

Después de semanas de preparativos, por fin este fin de semana Christian de Dinamarca ha celebrado su mayoría de edad con una gran fiesta a la que no han faltado algunos de los representantes de las principales casas reales europeas. Tras aparecer junto a su familia en el balcón para saludar a los cientos de daneses que han querido felicitar al hijo mayor del heredero por su 18 cumpleaños, durante la tarde, la reina Margarita ha ofrecido una cena de gala en el Palacio de Christiansborg, que se ha convertido en una suerte de ‘cónclave’ de futuros herederos de las monarquías más destacadas de Europa.

Una velada en la que, además de un despliegue de elegancia y sofisticación, también se han podido ver joyas impresionantes, algunas de ellas, ‘ocultas’ desde hace tiempo. Una cita en la que las nuevas generaciones han brillado con luz propia, aunque también ha habido algunas ausencias. Y es que, al igual que ocurrió en el cumpleaños de Ingrid de Noruega, a Dinamarca tampoco ha asistido la princesa Leonor, ni ningún representante de la monarquía española, aunque no ha sido la única ausencia.

Cuando la princesa Ingrid cumplió 18 años, el Rey Felipe sí estuvo en Oslo, ya que el monarca es padrino de la hija de Haakon y Mette Marit. En aquella ocasión, también acudieron representantes de la Casa Ducal de Luxemburgo y el príncipe Caros -hijo de los príncipes Guillermo y Estefanía-, fue el representante más joven del futuro de Europa. Esta vez, no ha habido presencia ni de Luxemburgo, ni de España. En el caso de la princesa Leonor, es probable que se deba a que este mes es decisivo en su vida institucional y a que, además, todavía no ha cumplido la mayoría de edad, algo que sí han cumplido las princesas Amalia, Elisabeth e Ingrid.

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A pesar de esto, el príncipe Christian ha estado acompañado por las que serán, en el futuro, sus coetáneas en la esfera royal. Amalia de Holanda y Elisabeth de los Belgas han acudido solas, sin la compañía de sus padres, lo que implica un paso más en su trayectoria institucional. Ingrid de Noruega, por su parte, lo ha hecho junto a sus padres, y Estelle de Suecia también en compañía de los suyos. La hija mayor de Victoria y Daniel de Suecia ha sido la invitada más joven, sin contar los miembros de la Familia Real de Dinamarca, y la única de las herederas o futuras herederas que, por edad, no ha llevado tiara.

Como era de esperar, la velada ha supuesto un impresionante despliegue de grandes joyas. Ingrid de Noruega ha reciclado un look de su madre, la princesa Mette Marit y ha apostado por la misma tiara de su mayoría de edad, un regalo por su 18 cumpleaños. Tanto Elisabeth de los Belgas, como Amalia de Holanda han sorprendido con nuevas joyas. La hija de Máxima y Guillermo ha viajado hasta Dinamarca tras participar en la boda de la duquesa de Medinaceli en Jerez y ha vestido de azul con joyas de diamantes y zafiros. En este caso, la princesa de Orange se ha decantado por un collar al que ha colocado una base para convertirlo en tiara.

Por su parte, la princesa Elisabeth ha lucido un vestido en color champán con escote palabra de honor y unos guantes largos. Como joyas, ha apostado por la tiara Wolfers, que fue un regalo de bodas a la reina Fabiola y unos pendientes de diamantes tipo chatones.

Además de las nuevas generaciones de royals, las anteriores también han brillado con luz propia. Marie Chantal de Grecia con una impresionante diadema de Diamantes y un vestido largo con falda plisada, mientras que su suegra, la reina Ana María, ha apostado por una de sus diademas más queridas, la misma que llevó en su boda.

A pesar de los rumores de desencuentros familiares, a la celebración no ha faltado el hermano del príncipe Federico, el príncipe Joaquín y su familia, que han querido acompañar a Christian en este importante día. El joven se ha mostrado muy feliz y agradecido a sus padres y a su abuela por los festejos y ha pronunciado unas emotivas palabras con las que ha reforzado su compromiso con el país.