Un exguardaespaldas de Diana de Gales revela qué habría hecho por el enfrentamiento de sus hijos

De ser uña y carne a estar en polos opuestos. La relación entre el príncipe Guillermo y el príncipe Harry nada tiene que ver hoy en día con la de hace unos años. No solo después de la muerte de Diana de Gales, cuando fueron un importante apoyo el uno para el otro, sino también también antes de este trágico suceso.

Sin embargo, en los últimos tiempos la situación ha cambiado. No tanto por el enlace del duque de Sussex con Meghan Markle, sino más especialmente tras el anuncio de su salida de ‘La Firma’ y las declaraciones que ha hecho en diferentes plataformas. El príncipe Guillermo tiene el mismo sentido del deber que su abuela, la Reina Isabel, quizás porque su papel es diferente del de Harry y por eso, para él, la imagen de la Corona es algo absolutamente prioritario.

Sea como fuere, la realidad es que la relación entre ambos hermanos es tensa. Es más, se sabe que en la última visita de Harry y Meghan a Londres apenas coincidieron y que incluso los Cambridge tuvieron un compromiso oficial fuera de Windsor el día que se celebró el primer cumpleaños de Lilibet.

Ahora, cuando están a punto de cumplirse veinticinco años de la muerte de Diana, el que fuera uno de sus guardaespaldas, Ken Wharfe, ha hablado sobre cómo cree él que la Princesa habría lidiado con el enfrentamiento entre sus hijos. “Cuando dos hermanos pelean, generalmente hay un pariente cercano para dar consejos, y Diana habría asumido ese papel”, ha dicho el británico, que cree que a Harry le hace falta tener a su lado alguien que le pueda dar consejos.

El que fuera guardaespaldas de la Princesa también ha comentado que ella estaría encantada con su papel como abuela -al igual que le ocurre al príncipe Carlos-, y le habría encantado pasar tiempo con sus cinco nietos, en cualquier circunstancia.

Ken también ha querido recordar algunas cualidades por las que destacó la Princesa a lo largo de su vida. “No había nadie como Diana. Sin duda, es la persona más carismática que he conocido dentro de la Familia Real. Durante el tiempo que estuve con ella, fui testigo del bien que hizo, los desafíos a los que se tuvo que enfrentar, su compasión y su generosidad”, ha comentado el exmiembro del personal de seguridad de los Windsor. No hay que olvidar que Diana de Gales, a pesar de su juventud y poca experiencia, desafió muchas de las convenciones protocolarias de la Familia Real y, aunque fue una de sus integrantes más destacadas, también su actitud generó algún que otro quebradero de cabeza.

El guardaespaldas estuvo más de quince años trabajando para la Familia Real. En concreto, con Diana de Gales lo hizo durante cinco años, desde 1988 hasta 1993, parte del momento más complicado de la relación entre el príncipe Carlos y Lady Di.