Las 24 horas en las que España perdió sus opciones de batir el récord de Barcelona 92

La mala suerte se cebó con España en los Juegos Olímpicos durante un periodo de 24 horas donde batir el récord de Barcelona 92 se convirtió en una quimera. La delegación española cosechó un revés detrás de otro hasta alcanzar una estadística insólita en su historia: registró siete cuartos puestos en apenas una jornada.

La conocida como medalla de chocolate es el resultado más duro para cualquier deportista de élite y nuestro país suma un total de 14 en estos Juegos Olímpicos únicamente superado en el ranking por Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña e Italia.

La reciente maldición del cuarto puesto comenzó con la vela con Jordi Xammar y Nora Brugman. Los archifavoritos de la categoría 470 mixto –donde son campeones mundiales y europeos– hacían una horrible medal-race que les apeaba del podio tras haber comenzado la jornada en el segundo puesto.

Esa mala señal vino seguida posteriormente por un partido malísimo de España contra India en hockey sobre hierba. Los nuestros dominaban por 1-0 cuando los asiáticos consiguieron empatar antes del descanso y culminaban su remontada en el último minuto estableciendo el 2-1 definitivo.

Por la tarde del jueves las cosas no mejoraron, España cosechó tres cuartos puestos en disciplinas poco esperadas como ciclismo en pista en la categoría de Omnium con Albert Torres rozando la medalla, el taekwondista Javier Pérez Polo en 68 kg o el atleta Quique Llopis en los 110 metros valla.

El remate final

Nadie en la delegación española daba crédito a que la maldición de las medallas de chocolate estuviese azotando a España como nunca. La mañana del viernes, sin embargo, no mejoró la cosa apareciendo dos nuevos cuartos puestos para las estadísticas de los nuestros y también en deportes diferentes.

Marcus Cooper y Adrián del Río se quedaba a escasas milésimas del podio cosechando un cuarto puesto en piragüismo K2 500 metros y pocas horas después se consumaba el descalabro en fútbol femenino con la selección campeona del mundo y de la Nations League capitulando ante Alemania por 1-0 fallando un penalti en el último minuto.

Si un tuerto no ha mirado a la delegación española que venga Dios y nos lo explique. España, sólo con haber sumado menos de la mitad de las medallas, ya estaría en una posición franca para igualar o superar el récord de Barcelona 92, pero nuestro país ha visto cómo la fortuna le ha sido completamente esquiva en este sprint final de los Juegos Olímpicos. No hay una explicación lógica a tantos cuartos puestos.