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El prestigioso L’Equipe retrata a Roures como uno de los atracadores de ‘La Casa de Papel’

  • Juanan Jiménez
  • Especializado en información nacional e internacional, breaking news, periodismo de datos y visualización, también escribo sobre motor y tecnología.

El escándalo provocado por Mediapro en Francia ocupa las principales portadas de los periódicos deportivos y de información general. El prestigioso L’Equipe retrata en su tapa de esta sábado al millonario trotskista Jaume Roures como uno de los integrantes del equipo de atracadores de la famosísima serie española La Casa de Papel.

Bajo el titular ‘El caso del Siglo’ el diario galo resumen un escándalo que ha afectado directamente al magnate de los derechos televisivos. Mediapro debía abonar 780 millones de euros por los derechos de retransmisión de la Liga francesa entre 2020 y 2024. Sin embargo, la productora del podemita Jaume Roures ha perdido los derechos al fallar en tres pagos, adeudando un total de 344 millones de euros.

El Tribunal de Mediación de Nanterre decidió invalidar el contrato que vinculaba al productor podemita con la competición francesa para los próximos cuatro años.

Jaume Roures, máximo responsable de Mediapro, negoció con los galos hasta comprometerse a indemnizarles con 100 millones de euros, además del cierre de su canal Telefoot, tras un fracaso sin precedentes en su desembarco en la Ligue 1. La empresa catalana de capital chino acordó con los dirigentes del fútbol francés pagar 64 millones de euros por la ruptura del contrato y 36 más por el primer semestre de 2021, que será la fecha en la que se alcance un acuerdo con un nuevo operador para dar el fútbol. Mientras que la Ligue 1 no firme con un nuevo operador, Mediapro se hará cargo de la retransmisión de los partidos y los costes que conlleven.

Este acuerdo, semiamistoso entre las partes, se encuentra a la espera de la aprobación del Tribunal de Mediación de Nanterre, quien lo debería validar entre el 17 y el 21 de diciembre. Mediapro ha decidido dar por perdida una guerra en la que hasta el presidente de la República Francesa, Emmanuele Macron, había tomado cartas en el asunto.

Ahora la prensa gala se ceba tras el duro golpe que ha supuesto para toda la competición el impago del operador catalán. Muchos equipos, especialmente los modestos, esperaban los emolumentos de los derechos televisivos, un jugoso pastel que en muchos casos supone la supervivencia de los equipos con menos ingresos económicos. Un modelo instaurado en España, en Francia o en Italia.

En Italia no se creyeron a Roures

Mediapro pasa por sus horas más bajas a nivel europeo. El escándalo en Francia ha golpeado la imagen de la productora, que se ha visto salpicado en el último año por varios escándalos relacionados con la compra-venta de derechos televisivos.

En Italia todavía está pendiente el litigio entre la empresa de Jaume Roures y varios clubes del Calcio. Pese a que Mediarpro presentó la oferta más alta para hacerse con los derechos del fútbol italiano, los clubes exigieron garantías del pago al magnate televisivo. Éste respondió que nunca había fallado en el pago, pero su palabra no fue suficiente y los clubes italianos decidieron ‘echar’ a Roures. El magnate catalán decidió entonces emprender acciones judiciales contra los clubes de la Serie A, a los que reclama 200 millones.

FIFAgate

Si los escándalos en Europa le están costando un disgusto a Roures, mucho más lo provocó el verse involucrado en el conocido como FIFAgate, una trama de corrupción entre altos cargos de la FIFA y varias productoras, entre ellas la filial americana de Mediapro, en la compra de derechos para la retransmisión de competiciones futbolísticas en Sudamérica.

En julio de 2018, el Grupo Imagina, matriz de la productora Mediapro, cerró un acuerdo con el FBI sobre su participación en el FIFAGate. Según comunicó la empresa, Imagina se declaró culpable de dos delitos de conspiración de fraude electrónico y pagó una multa de 24 millones de dólares, unos 20 millones de euros.

La Fiscalía neoyorkina aseguró que Mediapro había intentando desvincular en todo momento sus negocios en Miami (Imagina US), haciendo ver que era sólo culpa de la filial, cuando realmente la matriz estaba al tanto de lo que sucedía. También, se ocultó información durante meses a posibles socios y compradores.

Además, la compañía hispanochina devolvió 5,4 millones de euros a las federaciones de fútbol afectadas, así como otros 4,3 millones correspondientes a la devolución de los beneficios obtenidos gracias a los pagos irregulares. Unos 3 millones irían a la Unión Caribeña de Fútbol (CFU), así como 1,7 millones a la Federación Hondureña de Fútbol, 790.000 a la de Guatemala, 600.000 a la de Costa Rica y 565.000 a la de El Salvador.