Podemos a la desesperada por el cerco a su ‘caja B’: lanza a sus «trolls» contra el juez que la investiga

La imputación por delitos de malversación y administración desleal de tres altos cargos de la cúpula de Podemos, entre los que se encuentra la ‘mano derecha’ de Pablo Iglesias, ha dejado completamente fuera de juego a la formación ‘morada’. Los de Iglesias han lanzando a su ‘guerrilla’ de trolls en redes sociales para ensuciar la imagen del magistrado que investiga el caso, Juan José Escalonilla.

A la desesperada. La reacción de Podemos a la imputación de la mano derecha del vicepresidente Iglesias, del tesorero y de la gerente ha sido encender la que ellos mismos bautizaron como ‘máquina del fango’. El objetivo de su ofensiva propagandística es el magistrado Escalonilla, titular del Juzgado de Instrucción número 42 de Madrid, que les ha citado a declarar en calidad de investigados el próximo 20 de noviembre.

«El juez que archivó los chats de los policías contra Carmena. ¡Qué casualidad!». Así recibían la noticia en el chat interno ‘Guerrilla’, la plataforma no oficial que utiliza Podemos para difundir propaganda y consignas con las que inundar a diario las redes sociales. «Después se archivará pero ya han liado un show mediático para atacar a Podemos», aseguraban compartiendo una información del diario podemita ‘Público’ en la que se insinuaba que el magistrado se encuentra en connivencia con Vox.

Según esta particular visión de los hechos, Escalonilla habría permitido que la formación de Santiago Abascal se haya personado en el proceso por la ‘caja B’ de Podemos «saltándose» la obligación de dictaminar la «fianza habitual» a la formación verde. Sin embargo, el propio juez en su auto explica que esta decisión se toma en base a criterios recogidos en la Ley de Enjuiciamiento Criminal , alegando que «la exigencia de fianza constituye requisito de admisibilidad cuando es medio de iniciación del proceso penal, pero cuando el ejercicio de la acusación popular se realiza en un proceso en curso la necesidad de tal requisito no parece razonable».

Los chats contra Carmena

Podemos no se detiene en ese punto y pone a su ‘Guerrilla’ en redes sobre la pista de otro hecho protagonizado en el pasado por el magistrado Escalonilla: fue quien archivó en 2018 el caso de los comentarios contra la entonces alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, en un chat privado de policías. El juez entendió que el contenido de aquellas conversaciones era «ciertamente xenófobo e incitador al odio», pero no podía considerarse delito ya que se habían dado en un entorno privado.

Poco después de este señalamiento en ‘Guerrilla’, ‘La última hora’, el panfleto digital montado por Podemos y al frente del que Iglesias situó a su ex asesora Dina Bousselham, se hacía eco también de estas acusaciones contra el magistrado. La campaña de desprestigio ya estaba en marcha.

La cúpula de Podemos, al banquillo

El magistrado Escalonilla ha imputado a Juan Manuel del Olmo, secretario de Comunicación de Podemos, responsable de las campañas del partido y mano derecha de Pablo Iglesias, además de al tesorero, Daniel de Frutos Ramírez, y a la gerente del partido, Rocío Esther Val Val, tras la denuncia presentada por el abogado despedido José Manuel Calvente por posibles delitos de malversación y administración desleal.

El magistrado ha citado a los tres el próximo 20 de noviembre en calidad de investigados después de que Calvente ratificara su denuncia ante Escalonilla y declarara durante varias horas a finales del pasado julio.

Aparte de estas citaciones, el juez ha ordenado otras diligencias en el marco de esta causa que acaba de ponerse en marcha, como es requerir a Podemos abundante documentación que abarca desde la contabilidad hasta tablas de sueldos de trabajadores.

Contrataciones irregulares

La investigación se centra sobre todo en la supuesta implicación de Del Olmo en la contratación irregular de una agencia de comunicación para la campaña del 28-A.

También está citada una cuarta trabajadora del partido, Andrea Deodato,  responsable de Compras y Finanzas.