El mensaje que mandó Zidane a Isco en el duelo que midió a Real Madrid y Borussia Mönchengladbach en la sexta jornada de la fase de grupos de la Champions fue más que claro. Después de que ni calentara en el Ramón Sánchez Pizjuán en el partido que midió a los blancos con el Sevilla, ante los alemanes el galo mandó calentar a Asensio y Arribas, a los que dio entrada minutos después, dejando claro que el malagueño ya ha agotado todo su crédito. Y eso que no era escaso.
Zidane prefirió dar entrada al canterano Arribas, que ya debutó en la primera jornada de Liga ante la Real Sociedad y ahora se ha estrenado en Champions, que a un Isco que ni calentó por la banda del Di Stéfano. Una vez más vio todo el partido en la grada, donde están los banquillos desde que el coronavirus lo ha cambiado todo.
La situación de Isco en el Real Madrid es más que complicada. El malagueño quiere salir en el mercado de enero y visto lo visto a Zidane le da igual. El francés ha aprendido a vivir sin un jugador que lleva tiempo alejado de su mejor nivel, ese que mostró en la primera etapa del galo como entrenador madridista y que desapareció para siempre tras ver como Solari le apartaba. Algo parecido está viviendo ahora mismo con un Zizou que ni cuenta ni parece que vaya a contar con él por el momento.
Las salidas de Isco en el próximo mercado de invierno son escasas. De hecho, sólo hay dos equipos que podrían hacer un esfuerzo para hacerse con sus servicios. Uno es el Everton de Ancelotti, ya que el italiano ha pedido al club inglés que haga un esfuerzo por un futbolista al que conoce perfectamente, y el otro es el Sevilla de Lopetegui, donde tendría la confianza del entrenador, aunque los hispalenses no pueden hacer frente a su ficha y siempre llegaría en calidad de cedido. En menos de un mes se verá qué sucede con su futuro, aunque parece que no pinta en blanco madridista.
Arribas, una de las joyas de Valdebebas
Con 19 años, el madrileño es una de las perlas de La Fábrica. Uno de los motores del Castilla de Raúl que se ha ganado la confianza de Zidane, que siempre suele contar con él para que entrene con el primer equipo y cuando tiene oportunidad le da minutos. El canterano destaca por su calidad. También es un jugador rápido, ágil y que genera mucho peligro cuando coge el balón por su notable capacidad para regatear y, aunque no goza de una gran corpulencia, es muy fuerte y no se arruga en los choques.
Llegó al Real Madrid en 2012 procedente del Leganés y desde ese momento no ha dejado de crecer. Formó parte de la plantilla que el pasado verano ganó la primera UEFA Youth League en la historia del club blanco con Raúl como entrenador.
