El duopolio se ha vuelto a implementar en la Liga Santander. Después de varios años con el Atlético de Madrid peleando por el título, esta temporada, Real Madrid y Barcelona son los únicos candidatos a ganarla. Los dos gigantes de nuestro fútbol se encuentran al frente de la clasificación, con una igualdad máxima -empatados a 43 puntos- que, parece, se mantendrá hasta las jornadas finales del campeonato liguero. Será entonces, allá por mayo, cuando se decida si blancos o azulgranas se llevan el título.
Parece claro que uno de ellos será de nuevo el campeón de la Liga, al igual que en las últimas cinco temporadas. Pero, a diferencia de los anteriores cursos, esta temporada la lucha se vuelve a ver sólo reducida a ellos dos, soltando a un Atlético que este año no está cumpliendo con las expectativas.
La victoria del Real Madrid ante el Sevilla dejaba a los de Lopetegui -que son cuartos- a ocho puntos. Horas más tarde, el Atlético, que iba igualado a puntos con los hispalenses, caía en Eibar. La derrota rojiblanca dejaba a los blancos en cabeza, a la espera de lo que hiciera el Barcelona, pero descolgaba del tren de la Liga a los de Simeone.
Al Barça le costó, pero finalmente se impuso al Granada. Los culés se imponían en el debut de Setién por la mínima, devolviendo la igualada a lo más alto de la clasificación. Madrid y Barcelona se ponen con 43 puntos al frente de la Liga Santander, dejando a sus dos más inmediatos perseguidores a una distancia que se prevé insalvable.
Una lucha de dos que no es nueva. Desde la temporada 2009-10 se convirtió en algo habitual ver a los dos grandes disputándose el título desde la primera jornada. Cualquier despiste a lo largo del campeonato podía costar un título que se ponía muy caro, al necesitar incluso 100 puntos para proclamarse campeones en los tiempos de Mourinho y Guardiola. Una época que se ha visto interrumpida con la aparición del Atlético, pero que ahora vuelve otra vez a escena.