Hay dos vías bien conocidas que pueden desembocar en el fichaje de Kylian Mbappé por el Real Madrid. La primera es que el equipo blanco y el Paris Saint-Germain lleguen a una acuerdo de traspaso y el movimiento se produzca durante este mes de agosto. La segunda es que haya que esperar hasta el verano de 2024 para que expire el contrato del jugador y llegue libre a la capital española. ¿Eso es todo? No, existe una tercera hipótesis que ahora mismo parece difícil, pero que puede ganar fuerza si la explosiva convivencia entre Mbappé y el PSG se calienta todavía más: una rescisión de contrato por un posible caso de acoso laboral.
Hace diez días, el PSG anunció que dejaba a Mbappé fuera de la gira de pretemporada por Japón y le condenaba a entrenar en París junto a los jugadores descartados por Luis Enrique. «Se puede considerar un caso de acoso. Puede parece extraño, pero todos los jugadores de fútbol tienen derecho por un acuerdo de trabajo que consagra sus derechos y obligaciones. Por eso un club no puede apartar a un jugador del trabajo con sus compañeros», explica el abogado italiano Mattia Grassani, con 30 años de experiencia en el fútbol de élite, en declaraciones a OKDIARIO.
Este experto subraya que la situación se agrava porque a Mbappé le falta menos de un año de contrato: «Este puede ser lo que en Italia llamamos un movente, la estrategia que usa el club para recuperar la fuerza cuando no la tiene y presionar para que su jugador renueve tomando medidas que pueden ser ilegales porque significa marginación. Todos los jugadores, Mbappé también, tienen derecho a realizar el mismo trabajo que sus compañeros. Si eso no ocurre, podemos estar ante un caso clásico de mobbing (acoso laboral) y los daños sufridos por el jugador le pueden llevar a pedir la rescisión del contrato y el pago de una indemnización. Es lo que pasó entre Pandev y la Lazio».
El 23 de diciembre de 2009, la justicia italiana dio la razón a Pandev en el proceso judicial que había interpuesto contra su equipo, la Lazio. El macedonio, que se encontraba en su último año de contrato, había denunciado al club por apartarlo debido a su negativa a renovar. Dos meses después, la justicia rescindía el contrato y condenaba a la entidad a pagar una indemnización de 160.000 euros al futbolista. Acto seguido Pandev fichó por el Inter de Mourinho, con el que ganó el triplete aquella misma temporada.
El mercado de fichajes no importaría
Además, esta hipótesis tiene otra derivada: no está sometida a los periodos del mercado de fichajes. Es decir, que si Mbappé siguiera apartado en el PSG más allá del 31 de agosto, decidiera denunciar al club y la justicia le diera la razón como a Pandev, en ese momento sería libre para fichar por cualquier club, sin necesidad de esperar a que el mercado se reabriera en enero.
«Según mi experiencia y mi conocimiento del caso, el jugador tiene más fuerza que el club en este momento. El club no se está comportando bien con el jugador y eso es un hecho.El jugador es libre de decidir si quiere renovar o si quiere marcharse a otro club. Si el jugador dice ‘No’ a ambas opciones, no está cometiendo ninguna falta. El gran peligro de este caso es que ambas partes salgan perdiendo», concluye Grassani.