Reinier Jesus está a pocos días de cumplir 18 años y de igual manera próximo a su fichaje del Real Madrid. Al brasileño parecen no pesarle ni las intenciones de unos de los equipos punteros del fútbol europeo ni que el foco mundial está ahora sobre él. Aún con 17 años, el talentoso centrocampista sigue dando que hablar tras su convocatoria para la selección brasileña sub-23, donde es el jugador más joven de la expedición, y dónde se encuentra concentrado en Granja Comary, búnker de la Federación Brasileña de Fútbol.
El que será jugador blanco dentro de pocos días –firmará hasta 2026–, está deslumbrando en los primeros encuentros de preparación del combinado brasileño, que está a las puertas de la disputa del Preolímpico ante que otorga una plaza para los próximos Juegos Olímpicos, dónde se enfrentará ante Perú, Uruguay, Bolivia y Paraguay.
Pero antes de este torneo, la sub-23 de Brasil y Reinier estuvieron en liza en dos amistosos ante Boavista y La Portuguesa-RJ, donde el jugador brilló y mostró algunos de los motivos por los que el Madrid se ha fijado en él.
Convocado con los ‘mayores’
No parte en principio Reinier con el cartel del titular por la diferencia generacional con el grupo que ha conformado André Jardine, pero los minutos que está dando desde el banquillo están siendo beneficiosos para la selección canarinha.
Ante Boavista salió desde el banquillo Reinier con el 1-0 en el marcador. Su producción fue total ya que anotó un gol y asistió con otro a uno de sus compañero. Fue sustituido antes del término del duelo debido a unas molestias y el choque acabó 4-0.
El último encuentro ante La Portuguesa-RJ, la sub-23 fue una apisonadora. El conjunto brasileño venció por un contundente 7-0 donde Reinier volvió a mostrar su juego y efectividad. El que será jugador merengue repitió en este amistoso, salió de inicio y fue partícipe en el primer gol con una asistencia y logró transformar el tercero. Al descanso fue sustituido. El joven espera oficialidad de su fichaje por el Real Madrid, sigue creciendo y pone el foco en su fútbol. No le tiembla el pie.
