No fue una noche fácil la que tuvo que vivir el Real Madrid en Mendizorroza. 2023 le tenía preparada una última prueba de altura a los blancos. El Alavés les puso las cosas tremendamente complicadas a los de Carlo Ancelotti. El conjunto vasco creó una emboscada donde los madridistas estuvieron muy cerca de caer. Un partido lleno de trampas que hicieron sufrir al líder de la Liga, un liderato que recupero, precisamente, en Vitoria gracias a un gol de Lucas Vázquez a los 92 minutos. Una diana que se celebró a lo grande y es que no era para menos.
Hay veces que los equipos ganan mucho más que tres puntos. La victoria vale igual que cualquier otra, pero es muy diferente. Es un triunfo de esos que ganan Ligas. De esos que uno recuerda cuando el calor empieza a hacer acto de presencia por el mes de mayo y su equipo está cerca de entonar el alirón. Y, precisamente, eso fue lo que logró el Real Madrid ante el Alavés.
Lucas Vázquez cabeceaba un centro de Kroos en el descuento, los blancos celebraban, el gallego y Rüdiger se marcaban un bailecito camino de su campo, se volvía a remangar para proteger el preciado botín en los minutos finales y terminaban celebrando. Celebrando mucho. Quizá, demasiado para ser la jornada 18 de Liga, penúltima antes de llegar al ecuador. Pero es que en el vestuario madridista la alegría desbordaba.
Pitó Isidro Díaz de Mera el final y todos los jugadores del Real Madrid buscaron a Lucas Vázquez, con el que se fundieron en un abrazo que formó una piña. Luego, se dirigieron hacia la afición madridista presente en Mendizorroza, pero ir después a un vestuario donde la fiesta continuó. En los pasillos del estadio vitoriano se escuchaban golpes, aplausos y gritos de jolgorio que provenían de la caseta madridista.
El Real Madrid celebró la última victoria del año a lo grande, por lo que significa y por como se logró. Con 10 hombres sobre el césped durante más de media hora y en el tiempo de descuento, así ganaron los hombres de Carlo Ancelotti un partido que les permite poner punto final al 2023 con un grandísimo sabor de boca y recuperar un liderato que tratarán de defender hasta el final del curso.
La satisfacción de Ancelotti
En rueda de prensa, Ancelotti se mostró muy satisfecho por la victoria ante el Alavés: “Ha sido difícil y complicado, pero gracias al enorme compromiso del equipo hemos ganado. Jugar con diez durante más de media hora ha supuesto un esfuerzo enorme. Por ello hemos merecido ganar al final”.
“El partido ha sido complicado y con uno menos todo el mundo pensaba que podía ser el día que se pinchaba. Este equipo tiene energía desconocida. Hemos aguantado bien, jugado bien y defendido bien con diez y al final hemos tenido premio”, añadió el entrenador del Real Madrid.
El Real Madrid no pierde pulso
Tras 17 partidos, el balance del Real Madrid en la Liga es, simplemente, espectacular. Los blancos han perdido un partido y han empatado tres, dos de ellos a domicilio contra Sevilla y Betis, el otro frente al Rayo Vallecano en el Santiago Bernabéu. Los de Ancelotti ha encontrado una regularidad que sólo es capaz de seguir el Girona.
El Real Madrid aventaja en 10 puntos al Atlético de Madrid, aunque los rojiblancos tienen un partido menos que jugarán contra el Sevilla el próximo sábado, y en siete al Barcelona. Sólo el Girona, que suma los mismos puntos que los de Ancelotti, son capaces de seguir mirando a los ojos a un equipo que crece partido tras partido.
Un calendario favorable
El Real Madrid está a un partido de poner el broche a la primera vuelta. Si ganan al Mallorca el próximo 3 de enero en el estadio Santiago Bernabéu, serán campeones de invierno y continuarán con paso firme su caminar por el campeonato nacional de Liga. Empezarán la segunda mitad de la competición líderes y con un calendario que, a priori, les debería favorecer.
Tras el duelo contra el Mallorca, el Real Madrid, al igual que el resto de los equipos, tendrán que jugar 19 partidos para concluir el campeonato y la parte positiva para los madridistas es que en la primera vuelta, donde son líderes por el momento, deberán afrontar un campeonato que, sobre el papel, parece más asequible.
Y es que, el Real Madrid ya ha ido al dentista en muchas ocasiones en esta primera vuelta. Ha visitado a Barcelona, Atlético -única derrota-, Sevilla, Betis, Girona y Athletic, entre otros. Además, han jugado 10 partidos a domicilio, por lo que en esta segunda vuelta el Bernabéu será mucho más protagonista. Si son capaces de sacar adelante los duelos contra Valencia, Villarreal, Real Sociedad u Osasuna, estarán muy cerca de conquistar el título número 36 de la historia de la entidad madridista.