Jude Bellingham se agarró un cabreo monumental al descanso del Real Madrid-Almería con el árbitro del partido, Hernández Maeso. El inglés volvió a ser víctima de la misma cacería de todos los fines de semana y, fruto de su hartazgo, se lo hizo saber al colegiado. «Una falta aquí, otra falta allí», protestó el centrocampista, a lo que obtuvo como respuesta lo siguiente: «Estoy de acuerdo en lo que dices».
Esta respuesta del árbitro enfadó y mucho a Bellingham, que cuando se giró para iniciar su camino a vestuarios se desahogó de esta forma: «¡Oh Dios mío! ¡Enhorabuena! ¡No me pitas una p*** falta! ¡La misma mierda de todas las semanas!». Razón no le faltaba al segundo futbolista que más faltas recibe en toda la Liga EA Sports (56).
''¡La misma mierda todas las semanas!''. El enfado de Bellingham. #DeportePlus pic.twitter.com/XKpNWBtIbw
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) January 22, 2024
Al británico le golpearon cuatro veces a lo largo de los 90 minutos y acabó desquiciado con Hernández Maeso, que debutaba el pasado domingo pitando al Real Madrid. Bellingham fue el autor del primer gol de su equipo y empezó una remontada que culminaron Vinicius Junior y Dani Carvajal en los compases finales. Un día más, volvió a comprobar la agresividad del campeonato presidido por Javier Tebas, cuyos jugadores tienen a la estrella del conjunto madridista en el punto de mira.
Hernández Maeso no tuvo su día en su estreno en un encuentro de los de Carlo Ancelotti, primero por la permisividad hacia las faltas cometidas por el Almería y, después, por no acertar en ninguna de las decisiones polémicas, puesto que Hernández Hernández le tuvo que corregir desde la sala VOR de la Ciudad de Las Rozas. Esto último hizo que añadiera 11 minutos en la segunda mitad, al que se sumaría otro más.
Hernández Maeso desesperó a Bellingham
El árbitro fue muy permisivo con el Almería, al que consintió dar todo tipo de palos a los blancos. Pero fue el inglés quien más recibió. De hecho, acabó la primera parte dolorido y con el tobillo sangrando, después de que le clavaran los tacos y el colegiado no pitase ni siquiera falta.
Corría el minuto 36 cuando el jugador del Real Madrid sufrió una dura entrada. Bellingham dio un pase en el centro del campo y sufrió un pisotón en la cara interna de su tobillo derecho. Aunque el colegiado estaba a poco más de un metro de la acción, dejó seguir y no castigó una acción que era merecedora de tarjeta.
Bellingham se quedó en el suelo tendido, doliéndose de su tobillo. Cuando terminó la jugada y el juego se detuvo, el británico no dudó en reclamarle al árbitro que no hubiera ni siquiera indicado falta, mostrándole su media, que estaba ensangrentada y con la marca de los tres tacos en su tobillo.
A medida que pasaron los minutos, el inglés seguía indignado con la decisión de Hernández Maeso. Bellingham parecía que seguía con dolor tras el duro pisotón de Kaiky y no hacía más que muestras de desacuerdo hacia el colegiado. Y es que el colegiado extremeño terminó la primera mitad desquiciando a los jugadores del conjunto blanco.
A pesar de la dureza empleada por los jugadores del Almería, los andaluces no vieron la tarjeta amarilla hasta que comenzó la segunda parte. Terminaron tras los primeros 45 minutos con ocho faltas, pero el árbitro dejó, además de la de Kaiky a Bellingham, varias acciones sin señalar.
