La llegada al Real Madrid de Endrick a partir del próximo verano, una vez que alcance la mayoría de edad, no supondrá un impedimento para que el club blanco intente el fichaje de Mbappé si no renueva con el PSG. El club madridista considera que Endrick es un 9 puro que es compatible con el francés. Eso sí, incompatible con Haaland.
Endrick (Taguatinga, 2006) se ha convertido a sus 17 años en la sensación del fútbol brasileño. Flamante campeón del Brasileirao con el Palmeiras con un inesperado protagonismo final y ya convocado por la absoluta de Brasil, el delantero se incorporará al Real Madrid el próximo verano, una vez que cumpla los 18 años el 21 de julio.
Endrick fulmina a Ronaldo y Neymar con su edad https://t.co/RE4FQcKPr1
— okdiario.com (@okdiario) December 7, 2023
La llegada de Endrick, estratégica para el Real Madrid y que ya conoce de primera mano el Bernabéu y Valdebebas, puede hacer variar los planes del club en el largo plazo (dependerá de su velocidad de adaptación y crecimiento) pero no supone freno ni impedimento alguno a la llegada de Mbappé a la casa blanca… siempre que se den las circunstancias.
En el Real Madrid se considera que Endrick es un delantero centro puro y su demarcación natural no se solapa con la de Mbappé, que prefiere arrancar desde el costado izquierdo o la mediapunta con un delantero delante de él. En la Dirección Deportiva del club blanco se cree que Endrick y Mbappé son perfectamente compatibles e incluso podrían ser jugadores perfectamente complementarios en el frente de ataque.
Endrick y Mbappé, compatibles
Ambos tienen un tren inferior poderosísimo, son veloces y demuestran potencia a campo abierto. Mbappé ya es un futbolista hecho que, a sus 24 años, colecciona títulos aunque le falte la Champions. Todavía. Endrick es un proyecto de jugador con un cuerpo impropio de su edad y una precocidad que han mostrado otras leyendas del fútbol brasileño desde Ronaldo a Neymar.
En el Real Madrid se frotan las manos con Endrick, que ya está fichado, pero no renuncian al sueño de sumar a Mbappé a una fiesta en la que ya disfrutan Vinicius, Rodrygo o Bellingham. Sería una manera de tener otra vez una delantera temible a nivel mundial y un equipo llamado a dominar el fútbol europeo los próximos años.
Lo que sí puede provocar irremediablemente la llegada de Endrick al Real Madrid sería el adiós a Haaland. La realidad es que el delantero noruego nunca ha estado demasiado cerca de vestir de blanco por varias razones. La primera, y puede que la más importante, es que para el Madrid Haaland siempre ha sido el segundo plato. Y un segundo plato demasiado caro.
Además, la cláusula liberatoria de Haaland es de 200 millones, a los que habría que unir los 120 que pide el jugador como prima de traspaso. Es decir, sacar al noruego del Manchester City cuesta 320 kilos antes de empezar a hablar de su salario. Demasiado caro para que el Real Madrid vaya a por él una vez que ya tenga a Endrick en su plantilla.