«Brahim está destacando por encima de todos». El malagueño ha aterrizado en el Real Madrid con hambre y ganas de demostrar desde el primer día que está listo para mucho más que ocupar un rol de jugador secundario que tenga minutos cuando otros deban descansar. Quiere ser importante y se esmera en dejárselo claro a un Carlo Ancelotti que está observando de primera mano como ha progresado el mediapunta en los tres años que ha hecho la ‘mili’ en el Milan.
El Brahim que ha aterrizado en Valdebebas poco o nada tiene que ver con el de la primera etapa. Él mismo se esfuerza en dejarlo claro. «Cuando vine la otra vez era un niño, ahora tengo más partidos jugados en Champions…», aseguraba durante la rueda de prensa que dio el día de su segunda presentación como jugador del Real Madrid. Y la realidad es que así es. El andaluz ha llegado desde el primer día con ganas de demostrar y es imposible ocultar como ha madurado estos años. Del joven que llegó en invierno de 2019 sólo queda su calidad y las ganas de triunfar vestido de blanco. Esas se mantienen intactas.
Brahim siempre ha puesto al Real Madrid por delante de todo. Por eso, nunca dudó en regresar a Valdebebas si surgía la oportunidad. En el Milan era tremendamente feliz y siempre será su casa, pero el sitio donde quiere escribir su historia como jugador de élite es en el Santiago Bernabéu. A sus 23 años, tiene mucha carrera por delante para hacerlo.
Además, cuenta con el apoyo de Ancelotti, al que siempre le ha gustado, aunque tiene claro que nadie debe compararle con Asensio. «Si comparáis a uno con el otro, poco los habéis visto», asegura. Brahim es un jugador diferente, que aportará cosas distintas a la plantilla del Real Madrid. El italiano está encantado con su compromiso y su calidad.