El Real Madrid ganó a Las Palmas 2-0 en el estadio Santiago Bernabéu gracias a los goles de Brahim en la primera mitad y a Joselu en la segunda. Vinicius volvió a jugar, dejando claro que su lesión es cosa del pasado, mientras que los blancos volvieron a demostrar que tienen una falta de gol alarmante. Modric, que fue sustituido en el descanso ante el Atlético, ni calentó. La peor noticia fueron la lesiones de Alaba y Rüdiger
Brahim merece más
Brahim Díaz tuvo la oportunidad de comenzar el duelo contra Las Palmas como titular. Tras demostrar en cada aparición, por mínima que fuera, que siempre aporta, contra los insulares empezó desde el inicio y la casi hora que estuvo sobre el césped dejó claro que merece más minutos.
Jugó bien, se ofreció una y otra vez, estuvo participativo y terminó viendo portería. Su primer gol de la temporada. Es cierto que mereció marcar antes, pero finalmente abrió un marcador que no se movía para los blancos a pesar de las muchas ocasiones que estaban teniendo y desperdiciando. Además, pudo ser víctima de un penalti que ni el árbitro ni el VAR vieron punible.
A esto hay que añadirle que jugó con una luxación en el hombro que sufrió contra el Atlético de Madrid en el derbi. Por eso celebró el gol de manera contenida. Su esfuerzo fue muy agradecido por el cuerpo técnico madridista.
Un festival de ocasiones desperdiciadas
Saltó el Real Madrid al césped del estadio Santiago Bernabéu con ganas de curarse las heridas del derbi y dar una alegría a una afición madridista que, a pesar de ser un miércoles y jugar a las 19:00 horas, acudió al coliseo madridista. Y la realidad es que en el juego cumplieron con las expectativas, pero de cara a portería demostraron los problemas que tiene este equipo para hacer gol.
En la primera mitad, sin contar las oportunidades que quedaron en nada por fuera de juego, y que también erraron, el Real Madrid falló ocho ocasiones claras de gol. Más de media docena. Unos números alarmantes. Rodrygo, que no ve portería desde la primera jornada ante el Athletic, falló la primera clara a los seis minutos. Y repitió pasada la media hora. Joselu no acertó en el 21′ y en el 35′, en el 43′ y en 45′, mientras que Brahim y Nacho también se sumaron a la fiesta.
Todas estas oportunidades, falladas por los malos tiros de los jugadores del Real Madrid, llevaron a estadísticas tan alarmantes como que Joselu encadenó 15 disparos sin marcar, mientras que Rodrygo sumó 31. Todo era alarmante, hasta que en el último minuto de la primera mitad Brahim encontraba, por fin, el camino del gol.
Al comienzo de la segunda mitad, Joselu también puso punto final a su mala racha cabeceando un gran pase de Rodrygo. El delantero lo celebró con rabia tras las muchas ocasiones falladas. El Bernabéu se lo agradeció coreando su nombre.
Y regreso Vinicius
A los 58 minutos, Vinicius volvió a jugar con el Real Madrid. No lo hacía desde el 25 de agosto en Vigo, cuando se lesionó ante el Celta. Algo más de un mes de espera que finalizó contra Las Palmas. Saltó al verde en medio de una tremenda ovación y no tardó en pedir la pelota. Tenía ganas de disfrutar.
Se quedó sin marcar, pero recuperó un ritmo que al Real Madrid le vendrá muy bien para los próximos partidos. Los blancos tienen que jugar contra el Girona, líder de la Liga, y frente al Nápoles, por lo que necesitan la mejor versión de un futbolista diferencial.
También volvió Ceballos, que debutó esta temporada tras superar una lesión que sufrió en pretemporada. El utrerano firmó unos minutos más que notables sobre el césped del Bernabéu. Una buena noticia para Ancelotti, que tiene un recurso más.
Modric ni calentó
Luka Modric ni calentó contra Las Palmas. Se podría pensar que Ancelotti le dio descanso, pero tras jugar sólo 45 minutos fue extraño que no tuviese ni un solo minuto ante los insulares. Ni calentó. Tampoco jugó Jude Bellingham, pero el inglés sí tuvo un merecido descanso tras haberlo jugado todo.
Por último, la peor de las noticias fue la lesión de David Alaba. El austriaco sufrió una dolencia en el abductor derecho y tuvo que abandonar el terreno de juego en la primera mitad. Está pendiente de pruebas, pero se le podría descartar tanto para Gerona como para Nápoles. Rüdiger también acabó con molestias en el gemelo derecho.
