Gareth Bale vuelve a estar de baja en el Real Madrid y en esta ocasión es la espalda la que le está impidiendo participar con sus compañeros en la dinámica de entrenamientos. Carlo Ancelotti confirmó la dolencia del futbolista galés, cuya profesionalidad se ha puesto en duda, entre otras cosas, por la predilección al golf, donde este tipo de lesiones son habituales y los médicos aconsejan cuidar la zona de manera especial.
La instrucción de Bale al Real Madrid de no publicitar los partes médicos que informan de sus lesiones impide conocer con exactitud el lugar de la espalda donde el galés tiene su dolencia, pero en una aproximación y comparación con las clásicas lesiones del golfista llegamos a la zona lumbar, en la que se producen dolores habituales entre jugadores, ya sean profesionales o amateurs, como en el caso de Gareth.
El futbolista del Real Madrid es un gran aficionado al golf y no tiene ningún problema en hacerlo público, pero su lesión ha levantado ampollas entre los aficionados del conjunto blanco, algunos de ellos incluso haciendo cábalas de cómo ha podido llegar un nuevo problema físico del internacional galés.
La lesión en la espalda suele responder, como aseguran jugadores habituales, a una carga acumulada desde la repetición del swing que a un chasquido o trauma asociado a un solo movimiento. Esta carga en la zona, sumada al ejercicio extra que puede suponer para un deportista profesional puede dañar los discos intervertebrales y convertir la molestia en lesión, con su consiguiente parón obligado.
Inédito en cuatro meses
La tarjeta de Bale en la presente temporada en el Real Madrid se limita a tres encuentros disputados, el último de ellos el 29 de agosto, y un escasísimo total de 193 minutos. El galés encadenó dos lesiones y regresó, formando parte del banquillo, en el derbi madrileño del pasado 12 de diciembre. Acto seguido, se contagió de coronavirus y esta última lesión en la espalda completa el cero de Gareth en los últimos 132 días.